nunca pensé que pudiese haber gente tan mala en
peraleda de san roman, que sin esperar beneficio ni
plaza pudiese querer hacer daño tan absurdamente, pero la justicia siempre llega y a esos que tanto reclaman, les llegará y tendrán que pagar por el daño hecho. Es triste pensar eso pero nunca podria creerlo de un
pueblo que siempre que he ido me han tratado tanbien y de forma tan cariñosa y amable debe ser que siempre hay manzanas podridas en todas partes.