Hasta pronto
Hoy busque en el espejo y no había nadie…
Estoy llegando al final del camino, ya pronto, muy pronto
la vida comenzara a contestarme todas las preguntas y debo,
como buen alumno, sentarme con respeto a escuchar.
Si me pusiera a mencionar a todas las personas con las que he
compartido en esta pagina no podría terminar. He tenido mucha suerte al encontrarlos,
ustedes saben quienes son. Todos y cada uno quienes se han tomado la molestia de
dejar su comentario en mis escritos han sido la salpicadura del agua que ha
mantenido mi fe viva por mucho tiempo. Todos han sido un faro de amistad en medio de la oscuridad y les agradeceré por siempre. Y a todos, gracias por ser bellas personas cada cual con su propia personalidad y encanto. Siento que me dieron más de lo que debían darme.
A los que nunca contestaron mis comentarios o mis saludos, les agradezco doble, pues me enseñaron el color de una característica humana que no conocía… la vanidad.
No fui como otros que siempre “solían decir”… yo dije.
Ahora, me retiro (no soy bueno para las despedidas).
La campana de la iglesia esta sonando…
Y espero que detrás de ella haya ángeles que estén dispuestos a enseñarme el camino.
La vida es corta, muy corta y si la poesía es vida, entonces la poesía es corta.
No tuve tiempo para escribir todo lo que quería… pero espero que el Señor me permita llevarme mi cuaderno a donde voy.
Ojala que algún día podamos compartir otro poema.
Hoy busqué en el espejo y no había nadie…
Hoy busque en el espejo y no había nadie…
Estoy llegando al final del camino, ya pronto, muy pronto
la vida comenzara a contestarme todas las preguntas y debo,
como buen alumno, sentarme con respeto a escuchar.
Si me pusiera a mencionar a todas las personas con las que he
compartido en esta pagina no podría terminar. He tenido mucha suerte al encontrarlos,
ustedes saben quienes son. Todos y cada uno quienes se han tomado la molestia de
dejar su comentario en mis escritos han sido la salpicadura del agua que ha
mantenido mi fe viva por mucho tiempo. Todos han sido un faro de amistad en medio de la oscuridad y les agradeceré por siempre. Y a todos, gracias por ser bellas personas cada cual con su propia personalidad y encanto. Siento que me dieron más de lo que debían darme.
A los que nunca contestaron mis comentarios o mis saludos, les agradezco doble, pues me enseñaron el color de una característica humana que no conocía… la vanidad.
No fui como otros que siempre “solían decir”… yo dije.
Ahora, me retiro (no soy bueno para las despedidas).
La campana de la iglesia esta sonando…
Y espero que detrás de ella haya ángeles que estén dispuestos a enseñarme el camino.
La vida es corta, muy corta y si la poesía es vida, entonces la poesía es corta.
No tuve tiempo para escribir todo lo que quería… pero espero que el Señor me permita llevarme mi cuaderno a donde voy.
Ojala que algún día podamos compartir otro poema.
Hoy busqué en el espejo y no había nadie…
