Romería de la Virgen de Belén:
El Domingo de Cuasimodo, el que sigue a la Pascua de Resurrección, se celebra la romería de Nuestra Señora de Belén, que en realidad comienza el día anterior haciendo el “camino” con el traslado de la Virgen, antes desde el Convento de Carmelitas (hoy cerrado), y actualmente desde el Campo de Marín. La ciudad queda desierta, mientras que los alrededores de la ermita bullen del gentío, celebrándose procesión, concursos de calderetas, compartiendo viandas entre los vecinos, y tambien con los forateros, que en Zafra no lo son.
Además se instalan grandes casetas para la diversión tanto de los jóvenes como de los que no son tan jóvenes, corriendo en abundancia el "riego" tanto de "birra" como de otros "zumos".
Según la tradición un domingo del mes de septiembre de 1624, cayó sobre la ciudad una enorme tormenta que originó un gran desastre. Por este motivo los Cabildos de la Villa y de la iglesia de La Candelaria, hicieron el voto conjunto de peregrinar en rogativa hasta la ermita de Belén todos los años por el domingo de Cuasimodo. Al parecer en 1750 le fue renovado el rostro y manos a la imagen, le pusieron ojos de cristal y fue desbastada por su excesivo peso.
Si tienes tiempo y quieres pasarlo de lo mejor, pásate este domingo en "Belen de Zafra", no te arrepentirás, seguro, garantizado.
Manolo.
El Domingo de Cuasimodo, el que sigue a la Pascua de Resurrección, se celebra la romería de Nuestra Señora de Belén, que en realidad comienza el día anterior haciendo el “camino” con el traslado de la Virgen, antes desde el Convento de Carmelitas (hoy cerrado), y actualmente desde el Campo de Marín. La ciudad queda desierta, mientras que los alrededores de la ermita bullen del gentío, celebrándose procesión, concursos de calderetas, compartiendo viandas entre los vecinos, y tambien con los forateros, que en Zafra no lo son.
Además se instalan grandes casetas para la diversión tanto de los jóvenes como de los que no son tan jóvenes, corriendo en abundancia el "riego" tanto de "birra" como de otros "zumos".
Según la tradición un domingo del mes de septiembre de 1624, cayó sobre la ciudad una enorme tormenta que originó un gran desastre. Por este motivo los Cabildos de la Villa y de la iglesia de La Candelaria, hicieron el voto conjunto de peregrinar en rogativa hasta la ermita de Belén todos los años por el domingo de Cuasimodo. Al parecer en 1750 le fue renovado el rostro y manos a la imagen, le pusieron ojos de cristal y fue desbastada por su excesivo peso.
Si tienes tiempo y quieres pasarlo de lo mejor, pásate este domingo en "Belen de Zafra", no te arrepentirás, seguro, garantizado.
Manolo.