Muy buenas, algunos nombres apenas me suenan, pero todavía recuerdo tantas cosas y tan buenas que nada más que pueda aunque mis abuelos, Eusebio y Angelita ya no vivan allí, siempre iré aunque solo sea a tomarme una cervecita al
bar del Mellizo o los chuscos y saludar al
amigo Alejandro el del
kiosco donde desde niño iba a
comprar las golosinas y los helados por las tardes.
Amigos y
amigas de
Vegas Altas, son muchos los recuerdos, por eso y por todo no cambieis NUNCA que con toda mi admiración a
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