¡Hola Antonio!
Por lo que veo coincidimos en el gusto por la lectura, yo soy lo que por aquí llamamos "ratón de biblioteca". Devoro todo lo que cae en mis manos, sin importarme el tema que se trate. Ahora gracias a la red disponemos los amantes de la lectura de infinitas posibilidades para satisfacer nuestro "hambre". También coincido contigo en la poca atracción por las redes sociales como el Facebook, aunque comprendo a la mayoría que se siente fascinada por ellas.
Con el Messenger ya es otra cosa porque abre un abanico infinito de encuentro entre gente distante por muchos kilómetros. En mi caso hasta con familiares del otro lado del charco. Es como diría Jesulín "Imprezionante".
En cuanto al tema que nos ocupa, te diré que en mis tiempos de instituto me tocó, por suerte, hacer un trabajo sobre el credo Naturalista en la Generación del 98, y así fue como tomé contacto con este ilustre escritor (posiblemente el mejor) que ha dado esta maravillosa tierra que es Extremadura, aunque también ha sido un perfecto desconocido para la gran mayoría. Lectora de sus obras, en principio por obligación y con el transcurso del tiempo por devoción, puedo decirte que a día de hoy su obra sigue siendo objeto tanto de desdenes como de aprecios, según de la corriente política que se sea.
Sus novelas fueron calificadas como pornográficas en la época. En ellas pone de manifiesto muchas hipocresías y prejuicios de la sociedad española. Obtuvo la crítica permanente de la sociedad de su tiempo por sus ideas reformistas, ya que fue un defensor a ultranza de la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, entre otros logros.
Con ésto lo que quiero decirte es que en "El médico rural", lo que Felipe pone de manifiesto y critica es la España rural analfabeta y abandonada a su propia involución, y para ello aunque sea con tintes autobiográficos utiliza el nombre de Palomas para darle más credibilidad al asunto, sin tener en cuenta que el pueblo ya existía y que podía herir susceptibilidades, como en este caso concreto ha sido. En cuanto a su suicidio, sufría un trastorno bipolar que fue posiblemente lo que le condujo a hacer semejante barbaridad.
Y después de esta parrafada deseo no haber aburrido ni a ti ni al resto de internautas. Si es así, lo siento pero suelo ser muy vehemente en las cosas que me gustan. Desde aquí animo a todo el mundo a conocer su obra.
Cristóbal también te mandó saludos, y digo mandó porque a estas horas ya está en los brazos de Morfeo, es que madrugamos para trabajar. Coincido contigo también en la hiper-actividad... Un fuerte abrazo.
Azucena
Por lo que veo coincidimos en el gusto por la lectura, yo soy lo que por aquí llamamos "ratón de biblioteca". Devoro todo lo que cae en mis manos, sin importarme el tema que se trate. Ahora gracias a la red disponemos los amantes de la lectura de infinitas posibilidades para satisfacer nuestro "hambre". También coincido contigo en la poca atracción por las redes sociales como el Facebook, aunque comprendo a la mayoría que se siente fascinada por ellas.
Con el Messenger ya es otra cosa porque abre un abanico infinito de encuentro entre gente distante por muchos kilómetros. En mi caso hasta con familiares del otro lado del charco. Es como diría Jesulín "Imprezionante".
En cuanto al tema que nos ocupa, te diré que en mis tiempos de instituto me tocó, por suerte, hacer un trabajo sobre el credo Naturalista en la Generación del 98, y así fue como tomé contacto con este ilustre escritor (posiblemente el mejor) que ha dado esta maravillosa tierra que es Extremadura, aunque también ha sido un perfecto desconocido para la gran mayoría. Lectora de sus obras, en principio por obligación y con el transcurso del tiempo por devoción, puedo decirte que a día de hoy su obra sigue siendo objeto tanto de desdenes como de aprecios, según de la corriente política que se sea.
Sus novelas fueron calificadas como pornográficas en la época. En ellas pone de manifiesto muchas hipocresías y prejuicios de la sociedad española. Obtuvo la crítica permanente de la sociedad de su tiempo por sus ideas reformistas, ya que fue un defensor a ultranza de la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, entre otros logros.
Con ésto lo que quiero decirte es que en "El médico rural", lo que Felipe pone de manifiesto y critica es la España rural analfabeta y abandonada a su propia involución, y para ello aunque sea con tintes autobiográficos utiliza el nombre de Palomas para darle más credibilidad al asunto, sin tener en cuenta que el pueblo ya existía y que podía herir susceptibilidades, como en este caso concreto ha sido. En cuanto a su suicidio, sufría un trastorno bipolar que fue posiblemente lo que le condujo a hacer semejante barbaridad.
Y después de esta parrafada deseo no haber aburrido ni a ti ni al resto de internautas. Si es así, lo siento pero suelo ser muy vehemente en las cosas que me gustan. Desde aquí animo a todo el mundo a conocer su obra.
Cristóbal también te mandó saludos, y digo mandó porque a estas horas ya está en los brazos de Morfeo, es que madrugamos para trabajar. Coincido contigo también en la hiper-actividad... Un fuerte abrazo.
Azucena
