Ayer se ha aprobado en Mexico D. F. la ley que permite el matrimonio entre parejas del mismo sexo y ampara la adopción de niños por estos matrimonios. Las leyes que reconocen y protegen derechos de las minorias han de ser siempre bienvenidas, en ningún caso son ni representan amenaza alguna para el resto del colectivo social. Evidentemente el resto de personas tenemos otras prioridades que para nosotros son mas importantes, pero no por ello debemos valorar de manera negativa estos avances sociales que permiten crear sociedades mas justas e igualitarias. El siglo XXI debe ser el siglo del respeto a los derechos del individuo pero tambien el del respeto a los derechos colectivos. Desde algunos sectores sociales se acusa de relativismo como algo negativo, yo creo que el relativismo es la base del humanismo, pues solo el cuestionamiento de cada uno de los valores vigentes puede llevar a alcanzar un consenso sobre cual es la clase de sociedad que queremos, que para mi es aquella donde los valores humanistas sean quienes regulen el funcionamiento de las sociedades.
Como miembro del colectivo humano me felicito por poder presenciar estos avances, que se alcanzan de forma consensuada y se plasman en leyes verificando así un derecho (el consuetudinario) que la sociedad ha alcanzado por una practica empiríca que influye decisivamente en la realidad que estas normas reconocen.
Como miembro del colectivo humano me felicito por poder presenciar estos avances, que se alcanzan de forma consensuada y se plasman en leyes verificando así un derecho (el consuetudinario) que la sociedad ha alcanzado por una practica empiríca que influye decisivamente en la realidad que estas normas reconocen.