Luz ahora 0,01592 €/kWh

LA HABA: Amigo Leganés gracias, me ha emocionado mucho el relato...

Amigo Pepe, hay leyendas que dan pánico. Verdad o imaginario, todo acontece porque se recrea o se sufre en la mente humana. Ahí te cuento una:

Hace muchos años, en un pueblo fronterizo entre las provincias de Badajoz y Sevilla, una mujer corría despavorida por todas sus calles buscando la casa del médico. Era muy de noche, reinaba una oscuridad total y su cuerpo avanzaba inclinado para compensar el fuerte viento y la lluvia que sin compasión azotaban todo su cuerpo. Acezante, ya exhausta, golpeó repetidamnente con el puño la puerta: "Abran, por Dios, abran rápido". El médico, alarmado, le franqueó la entrada y trató de calmarla viendo que no podía articular palabra. Jadeante y llorosa señalaba sin mirar a su propio vientre, muy abultado por embarazo, y repitiendo como una letanía: "Aquí está, aquí, aquí". Luego de apaciguarla, le preguntó qué le ocurría; y ella mirando hacia arriba, evitando su propio vientre, señalándolo como algo apestoso le dijo: "Ha vuelto a llorar, es niña y llora y llora, ¡es isufrible!".

La Santa Inquisición, entonces reinante, aseguraba que los niños que lloraban en el vientre de sus madres, o nacían con una cruz en el paladar, eran hijos del demonio. El médico, entre la incertidumbre y la compasión, la consoló hasta donde pudo pero le ambargaba un presagio de que algo horrendo se avecinaba.

Al día siguiente, la mujer fue a confesar. El cura, pegando los labios a la rejilla del confesionario, le dijo: "No insistas, no puedo absolverte si no confiesas tu gran falta, esa criatura es fruto del pecado, sólo la Santísima Vírgen parió sin conocer hombre". "Esto que engendro, lo juro por Nuestra Señora de la Coronada, no es obra de ningún hombre", le añadió ella para escándalo del cura que violentamente abandonó la confesión.

Un mes más tarde, con toda normalidad, nació una preciosa niña sonrosada y sonriente. La situación de la madre soltera, hay que situarse en pleno siglo XVII, era realmente de aislamiento. Los poderes fácticos del pueblo, luego de extender por doquier los llantos de la criatura en el vientre de la pecadora, se olvidaron de las penurias de esta mujer hasta la noche fatídica del veintidós de agosto de 1665, cuando la niña cumplía los site meses de edad. Esa horrible noche de seca tormenta, iba a remover las entrañas de todo aquel pacífico pueblo, sus alrededores y a toda la región.
La criatura -esa noche tenebrosa- mamaba del pecho de su madre, y en esto que dejando de mamar la miró a los ojos, Pepe, con siete meses, se arrancó un escupitajo de la garganta y la escupió a los ojos, ¡Puta!, le dijo con voz grave. Y comenzó a estirar los bracitos y las piernas, casi de pie en la falda materna, su cara se tornó rojísima y luego morada, y entre truenos y relámpagos comenzó a decir en latín algo así como "DOMUS AUSTRIACA CONTERET CAPUT TUUM", mal traducido "Casa de Austria enloquece cabezas". (Entonces reinaba en España Carlos II, El Hechizado, que iba a ser el último rey de la Casa de Austria). Aquella criatura era diabólica, la madre la soltó en el sofá y nuevamente se lanzó a recorrer, esta vez sin rumbo, las calles del pueblo. Hasta que el alguacil, amedrentado por la tormenta y la locura de la mujer, pidió ayuda y la acompañó a su casa. La escena que allí sucedió hiela la sangre al más arrogante: aquella criatura de meses, de pie en el sofá, profiriendo insultos en varios idiomas, escupiéndolos a todos, entre truenos y relámpagos, aquello era terrible. Y en medio de esta demoníaca locura, sin explicación, las campanas de la iglesia comenzaron a tañir, sin tregua, eran redobles a muerte constantes; el aguacil, acompañado de varios vecinos, se acercó a la iglesia: y estaba cerrada con llave, y las campanas sonaban y sonaban; abrieron la iglesia y buscaron en todas las dependencias, no había nadie; subieron hacia la torre y, ya coronándola, se hizo el silencio; no tenían valor para ver quien estaba allí arriba, peldaño a peldaño llegaron al campanario: no había nadie. Con el miedo en los tuétanos, volvieron a la casa maldita, aquello era un infernal espectáculo: dos curas, crucifijos, el médico.... y aquella enana y deforme maligna casi erguida, sangrando por los ojos, balbuciendo insultos, con voz de hombre, una y muchas veces más, hasta que, agotada, cayó tendidita en el sofá y, luego de algún estertor, se quedó dormida. Se hizo un gran silencio y, unos minutos después, la niña irrumpió en un llantito infantil que espantó (por normal) a todos los que allí estaban. Y la madre, acariciándola, se sacó un pecho y la dio de mamar.

Esa noche, se supo días después, murió Felipe II -padre del monarca reinante, Carlos II. Luego, lo de siempre, la Inquisición echó las culpas de la desgracia de la Casa de Austria, a estos acontecimientos. La niña y su madre no sólo desaparecieron del pueblo, sino también de su historia: probablemente, fueron quemadas vivas.

(Esto, Pepe, es lo que recuerdo de una historia que me contó una viejecita hace muchos años, yo lo he relatado a mi manera, pero esta historia está escrita y archivada con los nombres de todos los testigos (según ella), en la bibioteca de un pueblo extremeño. Perdona lo extenso del relato). ¿Qué te parece la leyenda?.

Buenas noches.

Amigo Leganés gracias, me ha emocionado mucho el relato sobre la leyenda a la que haces referencia, ya que soy un autentico forofo, sobre ciertas clases de temas relacionados con leyendas, ocultismo, y todo lo que a terror se refiere, aunque ya no tanto, pero de más joven, me apasionaban las peliculas de terror, recuerdo hace unos 30 o 35 años, o tal vez más, se proyectó una de las más espantosas peliculas de terror, claro que ya hoy y después de haberla visto tantisimas veces, solo te hace reir, pero entonces......... joder pasé unos dias, que no se me quitaba de la cabeza la dichosa pelicula, recuerdo que su título era "La noche de los muertos vivientes" jajajaja después y a partir de ahí y al ver que fué todo un éxito, se proyectaron infinidades de ellas, todas por el estilo "Los Zombies" claro ya hoy pués no se siente nada, son tantas y todas por el estilo. Mira Leganés volviendo al tema referente al inicio de mi escrito sobre mitos y leyendas, no se si a ti te mencionarian algo el amigo Maldonado, el Gory o algún otro, ya y que tu tambien los conocias, verás en el Pedro de Valdivia sucedieron algunas cosas que realmente acojonaban, sucesos extraños, rara era la noche que algunos de los internos, no gritase pidiendo auxilio, pero unos gritos de terror, manifestando haber visto algo aterrador sobre sus camas, yo particularmente también en un par de ocasiones, via algo que me aterró, la primera vez tres camas mas abajo de la mia, ya que eran unos cuartos enormes, si mal no lo recuerdo, en cada cuarto habia al menos unas treinta camas y habia cuatro cuartos iguales, bueno como os comentaba, tres camas mas atras de las mias o sea en la del numero 26 ya que el mio era el 23, vi la silueta de dos personas muy parecidas fisicamente, las dos con unas batas blancas "tipo doctor" ambos dandome la espalda, los dos enormemete altos mas que altos, altisimos y muy raquiticos, o delgadisimos, uno de ellos, ligeramente agachado sobre la cama del Nº26, pués como ya os comenté alli más que por motes, nos identificabamos por nuestro correspondiente numero, el mio era el 23, los menos me llamaban por mi nombre, pero la gran mayoria por mi número, bueno continúo, no les pude ver la cara por dos razones, primero porque estaban de espalada hacia mí, y segundo porque el terror me obligó a encogerme y taparme la cabeza, al dia siguiente comentamos el hecho, y resultó que además de yo, el Nº30 o 31 no recuerdo bien, tambien lo vió, pero sin embargo el Nª26 <al que le sucedió> no tenia la mas minima señal de violencia ni de nada, ni él mismo recordaba nada de lo sucedido, en una segunda ocasión, tambien ví entre los espacios existentes entre las camas posteriór a la mia, a un pequeñisimo personaje, pequeñisimo porque no se si caminaba agachado o es que era asi de pequeño, caminaba a saltitos, exactamente como lo hacen los pájaros, teniendo encuenta que era denoche y la única luz que entraba por los enormes vetanales de los cuartos, era la luz de la luna, aunque eso si, se dibujaba perfectamente la silueta de dicho personaje,,,, a ese si le vi la cara se veia un hombre u hombrecito de unos cuarenta y tantos años, tal vez cincuenta, no se me olvidará jamas, un pelo negrisimo en abundancia y muy rizado, su piel, ya que consegui verle su cara por unos segundos, era muy morena, no negra, muy oscura, al igual que su vestimenta, creanme, su cara era aterradora, jamás la olvidaré, de tal forma se apopderó de mi el pánico que intentaba gritar y no podia, todo lo único que pude hacer, fué encogerme y taparme la cabeza con la manta y almohada.
Posiblemente amigo Leganés si tu en el instituto laboral eras amigo de Maldonado u otros del hogar, posiblemente te habrán contado algo al respecto, y si nó pues ya lo sabes, por eso te lo cuento yo, yo estoy totalmente seguro, que el dia que efectuen la demolición del edificio "Hogar Pedro de Valdivia" se van hallar muchas cosas entre sus cimentos, como agujeros muy porofundos e incluso pasadizos de tiempos de la guerra, lo que si es seguro, que el el Pedro de Valdivia sucedieros cosas extrañisimas, al menos en el periodo compredido entre los años 1956/1962, fecha durante mi estancia como interno,
Bueno amigos foreros perdonad, pues me he expandido algo más de la cuenta, pero hablando de leyendas, el mencionado relato que os acabo de contar, puede ser una de ellas, y ceanme, no es invención mia, ya y que si conoceis a alguien que huibiera estado en el Pedro de Valdivia por los años cincuenta y sesenta, os lo puede confirmar.
Venga espero os haya gustado mi relato e insisto que este no es una leyenda, es pura realiad, vivida aterradoramente, por todos los internos.
Un abrazo para todos.