De acuerdo en casi todo; el hecho de quedarnos en casa sin votar nos hace cómplices por omisión (los que votamos por acción) de todo lo que sucede. A veces no es cuestión de elegir lo mejor, sino lo menos malo, y solo desde dentro se pude cambiar, por lo que el quedarse en casa y "que todo nos la sude", no es sino otra forma de participar en este "vertedero de corrupción".
LA GRAN INCERTIDUMBRE
Ya participo en este vertedero "sin fondo" de corrupción pagando impuestos, la mitad del sueldo de un trabajador se va en ellos ¿te parece poco? El problema es que ese idilio vuestro con esa rajita de las urnas me afecta a mí de manera terrible. ¡Y cuál es la opción menos mala? ¿la sabes tú? No te referirás a esa tontería de las ideologías, ya he expuesto aquí sobradamente mi opinión sobre ello, las ideologías no existen y si alguna vez existieron han muerto, sólo depende de que las circunstancias te sean adversas o favorables para que se incline la balanza hacia un lado u otro, conozco a izquierdistas que por su forma de ser y manejarse son más de derechas que Fraga, y eso no lo va a cambiar el carné de un partido, la política es sólo una forma inmoral más de buscarse la vida. Las ideologías, al igual que los nacionalismos y las religiones para lo único que han servido es para que las tierras escupan sangre desbordando su capacidad de campo, una sangre que ha alimentado la sed insaciable de una legión de vampiros que han comerciado con la inocencia, el sufrimiento y los sentimientos de una pobre gente que creía luchar por la pureza de un ideal, cuando lo que realmente hacían es dar su vida y la de sus hijos como ofrenda para entronar o perpetuar en el poder a una casta indecente a la que, a esa sí, "se la suda" las tragedias cotidianas y viven en su torre de marfil alejados del barro, de la ruina física y mental a la que han abocado a millones de personas para las que no hay futuro y malviven mendigando un salario asqueroso, no tienen conciencia social desde el mismo momento en que traicionan la voluntad de su pueblo con su indiferencia, engaños y promesas incumplidas.
Te equivocas, la forma más revolucionaria de dinamitar el sistema desde su mismo corazón es destruyendo sus cimientos. Esto sólo se logrará con una abstención muy elevada, y cuando vean que a los palos del chiringuito se los están comiendo la carcoma, el país se hará ingobernable, entonces tal vez sea el momento de empezar desde cero y el pueblo pueda tener entonces voz y peso en unas decisiones que van a ser determinantes para su progreso y bienestar. Lo que es una irresponsabilidad es votar a un partido por su programa y que una vez que ese partido está en el gobierno se limpie el culo con él, y los ciudadanos no tenga mecanismos legales útiles y pacíficos para derrocar al gobierno de turno que ha engañado a sus votantes.
Piensa y actúa como quieras, amigo, a mí ya no me engañan más. La amarga incertidumbre que me corroe desde hace tiempo es si en verdad tenemos lo que nos merecemos, porque si es así, la decadencia supina de esta civilización no me hace albergar ninguna esperanza y estamos todos condenados. Nada me extraña viendo la desesperada reacción de mucha gente cuando el otro día se cayó el whatsapp.
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