Asfixiado por estos calores del incipiente verano, ya que mi cubículo del regato macarro carece de aire acondicionado, ni siquiera tiene un mísero ventilador. Salgo a dar una vuelta por el mundo de los corpóreos parándome a echar un vistazo por el asentamiento Maragato de los Entrines.
Y me entero de que se ha enterrado ese Catalán que combatió en el Ebro alistado en la quinta del biberón. Se ordeno sacerdote, se fue a bautizar, pero se dio cuenta que no había ni agua para esto. Y colgó los hábitos ... (ver texto completo)
Y me entero de que se ha enterrado ese Catalán que combatió en el Ebro alistado en la quinta del biberón. Se ordeno sacerdote, se fue a bautizar, pero se dio cuenta que no había ni agua para esto. Y colgó los hábitos ... (ver texto completo)