CASTILBLANCO: Hombre, lamento que te sientas ofendido; mis disculpas....
Hombre, lamento que te sientas ofendido; mis disculpas. Y que criticar es muy sano..., pero como dicen aquí, de forma inteligente, no echando el carro por las piedras.
Imitándole a usted, este es mi último escrito. Un beso.