No se conoce con exactitud la fecha de su fundación, a pesar de que algunos autores apuntan la posibilidad de que fuera fundado por el obispo de la Orden Mercedaria Fray Simón de Sousa en 1317, alegando para ello el hecho de que existiera hasta el siglo XVIII un
escudo mercedario en el presbiterio y de que aún hoy la titular del
convento siga siendo la “
Virgen de la Merced”. Sea como fuera, ya en 1573 se sabe que estaba instalado junto al solar que ocupa en la actualidad el
Hospital de
San Sebastián.
En el siglo XVII, los administradores de la obra pía fundada por el capitán Don Sebastián Montero de Espinosa deciden fundar el “Hospital de San Sebastián”, y para ello eligen el
edificio que ocupaban las Descalzas, a las que se les ofrece a cambio las
casas principales que tenía Don Sebastián Montero de Espinosa en la
calle San Onofre, actual calle Menacho, donde se trasladan definitivamente en 1674. Aquí se levantará el actual convento que fue terminado en 1700 gracias al apoyo y prestaciones económicas del obispo Marín del Rodezno.
Con la revolución de 1868 las monjas se retiran a
Santa Ana y el convento, que llegaba hasta la calle
Santo Domingo, será subastado. En 1874 el obispo Fernando Ramírez recuperó la parte del convento conservada hoy y, junto con el patrono del mismo, el Conde de la
Torre del Fresno, restaurará la
iglesia y su torre.
La planta de la iglesia tiene una sola nave con
coro alto y bajo a los pies. La nave se cubre con
bóveda de cañón con lunetos y presenta pilastras adosadas al muro. El presbiterio lo hace con bóveda de aristas, decorada con pinturas de temas eucarísticos y símbolos de la Orden, y
cúpula.
La bóveda de la iglesia está sostenida con contrafuertes, y un friso de tipo clasicista con triglifos y metopas recorre todo el exterior. Posee una torre –
campanario a los pies de planta rectangular y dos cuerpos con el de
campanas, que ofrece dos
arcos de medio punto entre pilastras en el frente mayor, y uno en el menor. Tiene dos
portadas, la principal, labrada en cantería, está formada por un
arco de medio punto entre
columnas clásicas sobre podiums rematadas por pináculos y
frontón triangular que contiene el escudo de la Orden. La otra
portada es moderna y fue construida para facilitar el acceso de la “Hermandad del
Cristo de la Amargura” en su
estación penitencial.
En el presbiterio existe un
retablo moderno de
fábrica, con pintura polícroma que imita a mármoles, de estilo ecléctico. Posee dos cuerpos, tres
calles y remate, presidido por una imagen de la “Virgen de la Merced”. En el muro del lado del evangelio existe una lápida sepulcral de los “Condes de la Torre del Fresno”, fechada en 1771; y en el lado de la epístola una pintura al óleo sobre lienzo de “Cristo recogiendo las vestiduras”.
Junto al presbiterio, a ambos lados, dos
retablos con columnas en madera dorada y pintada de la segunda mitad del siglo XVIII de estilo “rococó”, decorados con motivos vegetales, angelotes y rocallas. El del lado del evangelio contiene al Nazareno “Cristo de la Espina” y el de la epístola a la “Virgen de la Amargura”, titulares de la Hermandad. Los dos retablos rematan con cartelas, en una un “
Calvario” y en la otra un escudo.
La talla del “Cristo de la Espina” quizás sea obra de la primera mitad del siglo XVIII y la “Virgen de la Amargura” es del
escultor Cecilio García, de la primera mitad de nuestro siglo