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AZUAGA: Pues si, soy el Emilio, pero no me acuerdo de tí. Juan...

Pues si, soy el Emilio, pero no me acuerdo de tí. Juan hijo de Serafin y Lola.como nombras a mi hermano Paco, seguro que sería el practicante en tu casa. Dame más detalles pues seguro que te conozco.

Aquí en este pais se echa de menos mucho más la terruña por las costumbres (totalmente diferentes), la gente y sobre todo el clima tan crudo y frío con interminables inviernos. Yo ya me ambienté pero nunca renuncié a volver a Azuaga, el "pueblazo" que nos vió nacer. Cuando voy parece que el tiempo no ha pasado, porque a pesar del cambio tan radical a través de los años, aún encontramos el Castillo, el Cristo, la Piedra de la Cruz, el Cerro del Hierro y mucho más.

Quizás la juventud ahora crece más "espabilada" pues desde temprana edad disponen de la television, juegos electrónicos, ordenadores, internet, y tambien el alterno con las nenas, cosa que en nuestra época teníamos que hacer casi a escondidas.

Nosotros jugabamos a los "bolindres" en la Plaza del Cristo que era de arena o saltabamos a la "comba" el dia de los Santos en la carretera de Llerena camino del cementerio (que aún se hará, seguro), por la tarde a comer pan con chocolate y a escuchar la radio. Creo que nos lo pasabamos muy bien porque no se podía echar de menos cosas que ni existian.

Claro, ahora me alegro del progreso que yo mismo disfruto muchisimo, porque ayuda a pasar el tiempo más distraido y sobre todo más cómodo. Pero la añoranza de antaño siempre estará presente (será porque uno se va haciendo viejo!).

En fín saludos a todos y hasta la próxima.