Mocita, veo que no todo está perdido, porque por ser la primera vez que el paisanaje cibernético en general ha elegido a su representante ante ese mundillo pretendidamente imparcial en lo musical, ha salido tu otra cara; sin duda la mejor, y el Chikilicuatre no irá a ganar ni a demostrar sus altas dotes, sino que irá a divertirse divirtiéndonos de pasada. Para que luego haya quien diga que necesitamos ser tutelados debido a nuestra inmadurez.
Te digo esto, porque por tu otra cara me he enterado hace un rato, que cuando hace unas horas, esos intransigentes depravados rompieron un paisaje asesinando a un ser humano, repitieron la misma acción que otros de la misma calaña hicieron allá por el año 38 del siglo pasado con su abuelo por tierras de Toro, a quien también dejaron tirado en medio de un charco sangre.
Mi admirado Paco, (que en paz descanse); valenciano lúcido trasplantado a un barrio obrero de la ciudad de los condes reyes, expresaba por medio de su personaje Yo No Lo Entiendo, con palabras sencillas, ideas de gran calado que, por desgracia, agoreros actuales vuelven a colocar sobre el tapete. Por eso, hoy que la cosa está más consolidada después del alto precio que ha habido que pagar para llegar hasta aquí, hay que decirle a los divinos pasotas que pasamos de ellos y que a nosotros no nos da igual, que ya los griegos, cuando inventaron ese sistema llamaban idoetés, a los que se encerraban en sí mismos preocupados sólo por sus cosas, pues en esta telaraña en que vivimos todo está entrelazado.
Salud.
Te digo esto, porque por tu otra cara me he enterado hace un rato, que cuando hace unas horas, esos intransigentes depravados rompieron un paisaje asesinando a un ser humano, repitieron la misma acción que otros de la misma calaña hicieron allá por el año 38 del siglo pasado con su abuelo por tierras de Toro, a quien también dejaron tirado en medio de un charco sangre.
Mi admirado Paco, (que en paz descanse); valenciano lúcido trasplantado a un barrio obrero de la ciudad de los condes reyes, expresaba por medio de su personaje Yo No Lo Entiendo, con palabras sencillas, ideas de gran calado que, por desgracia, agoreros actuales vuelven a colocar sobre el tapete. Por eso, hoy que la cosa está más consolidada después del alto precio que ha habido que pagar para llegar hasta aquí, hay que decirle a los divinos pasotas que pasamos de ellos y que a nosotros no nos da igual, que ya los griegos, cuando inventaron ese sistema llamaban idoetés, a los que se encerraban en sí mismos preocupados sólo por sus cosas, pues en esta telaraña en que vivimos todo está entrelazado.
Salud.