Para la “dolç Catalunya, jo, follet de frondoses riberes i abundants fonts”, y para ti, denostado escribidor compulsivo, amante recalcitrante de tu lugar de nacimiento, siempre añorando los grandes espacios abiertos y el encinar clareado, desde un sitio de secano recién salido de feria, dedico esta exquisita perla hallada en los abismos insondables del mundillo de la internet, donde buscando, hallo ese gemelo uterino entre paréntesis encerrado.
(Ya ha pasado más de un siglo desde que sucedió esta historia, sin embargo, hay asuntos que tienen una vigencia eterna. El móvil del crimen de Don Benito todavía se repite con una frecuencia aterradora. La violencia de género, lejos de desaparecer, se diría que va en aumento. Una larga historia de jerarquías masculinas, en la que los hombres han dominado e impuesto sus reglas, nos ha llevado a disparates totalmente exagerados. Aún hoy día existen hombres convencidos de que son ellos quienes pueden decidir cuándo y cómo relacionarse con una mujer y, si la mujer se resiste -o se separa, o intenta vivir una vida digna sin ceder a sus deseos- la matan. La historia de Carlos e Inés María podría aparecer en cualquier crónica de sucesos de principios de siglo XXI: Un hombre asesta veintiuna puñaladas a una joven que se negaba a mantener relaciones.)
Ya ves, escribidor voluntarioso, con las bellaquerías que te han dicho algunos de tus paisanos en este foro y resulta, que hasta los más puritanos, nacionalcatólicos o sencillamente reconcomidos por el virus que todo lo mancha y degrada, también cuecen habas.
No le des rienda suelta a tu plumilla voraz, cuenta más de treinta y tres y si ya estás calmado, analiza ambos calcos, tan iguales, que mas bien diría que son dos partes de la misma gota de agua.
Antonio Drove, director, género policial. La huella del Crimen, es por eso que la canción me sonaba aunque tenía la letra olvidada.
Salud.
(Ya ha pasado más de un siglo desde que sucedió esta historia, sin embargo, hay asuntos que tienen una vigencia eterna. El móvil del crimen de Don Benito todavía se repite con una frecuencia aterradora. La violencia de género, lejos de desaparecer, se diría que va en aumento. Una larga historia de jerarquías masculinas, en la que los hombres han dominado e impuesto sus reglas, nos ha llevado a disparates totalmente exagerados. Aún hoy día existen hombres convencidos de que son ellos quienes pueden decidir cuándo y cómo relacionarse con una mujer y, si la mujer se resiste -o se separa, o intenta vivir una vida digna sin ceder a sus deseos- la matan. La historia de Carlos e Inés María podría aparecer en cualquier crónica de sucesos de principios de siglo XXI: Un hombre asesta veintiuna puñaladas a una joven que se negaba a mantener relaciones.)
Ya ves, escribidor voluntarioso, con las bellaquerías que te han dicho algunos de tus paisanos en este foro y resulta, que hasta los más puritanos, nacionalcatólicos o sencillamente reconcomidos por el virus que todo lo mancha y degrada, también cuecen habas.
No le des rienda suelta a tu plumilla voraz, cuenta más de treinta y tres y si ya estás calmado, analiza ambos calcos, tan iguales, que mas bien diría que son dos partes de la misma gota de agua.
Antonio Drove, director, género policial. La huella del Crimen, es por eso que la canción me sonaba aunque tenía la letra olvidada.
Salud.