ALMENDRAL: No puedo escribirte mocita sin que se quiebre mi pluma,...

No puedo escribirte mocita sin que se quiebre mi pluma,
hay una oscura censura que atenaza mis pensamientos
y nos los deja que fluyan libres como fluyen los vientos
sin que fuerzas contrapuestas los encierren en la cuna
donde esconden filias y fobias madres de los desencuentros.

Voz humana almendralense aclimatada a todos los vientos,
¿cómo osas expandirte cual ola por eriales encubiertos
de frescos jardines con rosas que engañan a los no despiertos
embriagándoles con perfumes emanados de podridos tiestos?
¿Los palos que antes te dieron no abrieron tu entendimiento?

Pregunta pues a la mocita que sabe mucho de esto
y almacena cientos de historias en el baúl de sus recuerdos
y, si del enemigo el consejo, ten los ojos bien abiertos,
que no es oro todo aquello que reluce tras postigos entreabiertos
porque, suele ser su resplandor lo que te convierte en muerto.

Es la envidia en las Españas pecado convencional
y se da por sentado que a quien levanta cabeza
se le tiene que cortar por políticamente incorrecto
si expresa sin ambages su visión particular
porque, no está bien visto. Y ya está.

Equivalente genial al aquí mandan mis “reales”
y todo aquel que no trague lo aparto y así no estorbe
contradiga o menoscabe, la difusión de mis ideales
pues, harto sabido es, que aquellos que se menean
en ninguna foto salen y son tildados de mochales.

Aunque parezca todo claro, aquí se está jugando al teto
y hay que tener mucho cuidado para no ser quien se agacha,
estar pendiente del peral, tener cuidado por detrás,
esquivar la acometida y si es posible diblar
cuidando que la pelota no deje nunca de rodar.

Los versos son malos, más malos que el rejalgar,
pero ya ves paisano, que no da la moza consejo en vano
y aunque es ser inanimado, le cortaron la cabeza,
dejaron sola en un secano y le cercenaron una mano
con su brazo. Pero conserva su baúl, y eso......
Salud.