Pues sí mocita, que debe ser eso que dicen por ahí, que hay tantos mundos como peces en la mar. De todos, hay uno que no gusta ni un pelo. Es el de las doñas Delicaditas, aunque también los hay del otro género con las mismas características. Las de estos orbes, al parecer se reproducen por clonación espontánea, me explico, de higos a brevas, bajan desde el alto lugar al que se han encaramado, echan una ojeada al personal normal, sueltan su paridita y se izan de nuevo hasta su alto pedestal, donde, como los bombones de chocolate, se envuelven otra vez en su celofán y permanecen inalterables. No aportan nada, ni dicen, su inanición es total; pero eso sí, cuando se dignan bajar al nivel de los normales, dan su opinión irrefutable, señalan con el dedo tieso y expelen la cagadita, que, como es muy corrosiva, destruye todo lo que queda a su alcance y, en ella, empiezan a desarrollarse unas larvas que rápidamente alcanzan la mayoría de edad. Así queda cerrado el círculo y empieza una nueva fase. Ni que decir tiene, que son inmunes a cualquier antídoto conocido y que se expanden a gran velocidad
Desde que americé en tu fuente, en la etapa anterior y antes que cerrarán este ambigú por razones que desconozco, noté su temida presencia y su “modus operandi” y ahora, empiezo a percibirla igual.
Salud.
Desde que americé en tu fuente, en la etapa anterior y antes que cerrarán este ambigú por razones que desconozco, noté su temida presencia y su “modus operandi” y ahora, empiezo a percibirla igual.
Salud.