ALMENDRAL: Las cosas que pasan cuando el tiempo se pone revuelto,...

Las cosas que pasan cuando el tiempo se pone revuelto, resulta que estoy leyendo otro libro escrito por otro paisano nuestro (voy a batir algún record). Este va de cazadores, segadores de sol a sol, con hoz y espaldas quemadas, aquellos que llevaban en la fiambrera para comer un cacho de tocino y morcilla patatera cocida antes para que dejara sustancia en los cuatro garbanzos que había conseguido la noche anterior su mujer o su madre. De señoritos con caballos blancos y manijeros de confianza. También de perritas luceros, de tiros equivocados, de perdices y conejos y de las liebres que se escapan. Este y el otro, los dos, tienen denominador común, la añoranza, la morriña del celtiña si está lejos de su casa.
Va a ser que tiene razón el duendin, que es el agua de la fuente, con tanta cal y tan dura, con su mocita en lo alto, que se le mete a uno en los sesos, por eso, cuando no se bebe, entra el síndrome y a la gente va y le da por describir las cosas que vieron, disfrutaron o sufrieron cuando eran chicos.
Me han dicho las buenas lenguas, que hay otro en puertas, a la espera de confirmaciones por aquello del rigor histórico, este escrito a cuatro manos también por gente de ahí y, que ya en embrión, hasta ha obtenido un premio y todo. También me gustaría leerlo aunque sea con gafas;( la edad nos hace maniáticos, mira que leer habiendo televisión, con la de cosas interesantísimas que se ven y oyen en ella).
Bueno paisanos, que paséis buena semana.
Pepiño.