La sombra de guadaña de una
bandera segadora recorre
los campos de cereales, la caña
partió con la flecha del mirlo,
y, junto con su cosecha, ¿qué desapareció?
¿Mi fantasía que en tiempos la convirtió en
«trigo oriental e inmortal»
o el peso de la indiferencia?
bandera segadora recorre
los campos de cereales, la caña
partió con la flecha del mirlo,
y, junto con su cosecha, ¿qué desapareció?
¿Mi fantasía que en tiempos la convirtió en
«trigo oriental e inmortal»
o el peso de la indiferencia?
¿Pero era realmente un reino diferente
el mío? Las mitras y los peones pueden desplazar
las sombras de un cambio de régimen
sobre las casillas de los campos, pero mi regalo,
que no puede recompensar suficientemente
a esta isla, que no aportó una comunión
de las lenguas, cuya mano izquierda
nunca apretó las gavillas en unión,
sigue exudando la resina que gotea
de la cálida axila de una colina, mientras ... (ver texto completo)
el mío? Las mitras y los peones pueden desplazar
las sombras de un cambio de régimen
sobre las casillas de los campos, pero mi regalo,
que no puede recompensar suficientemente
a esta isla, que no aportó una comunión
de las lenguas, cuya mano izquierda
nunca apretó las gavillas en unión,
sigue exudando la resina que gotea
de la cálida axila de una colina, mientras ... (ver texto completo)