En cuanto al origen del término «
Villena», hay cierta polémica. Menéndez Pidal propone que habría evolucionado de un hipotético antropónimo Bellius o Vellius y el sufijo -ana, tal como Lucena (Lucius + -ana) o Maracena (Marcus + -ana), que darían la forma
romana «Belliana» o Velliana. Sin embargo, ni Belliana ni Bellius se han documentado en época romana, amén de que la evolución de "Belliana" a "Villena" comporta ciertas dificultades fonéticas.