LAS SOMBRAS DE BENIDORM
Cuando la tarde termina
entre brisas soñadoras,
Benidorm lo determina
con sus marchas triunfadoras.
Entre playas de esperanza
con paciencia tentadora,
Benidorm tiene la danza
de su ambiente cualquier hora.
Música que va sonando
queriendo romper barreras,
con su marcha está logrando
hacer bellas las esperas.
Benidorm torres erguidas
entre brisas marineras,
con pasiones comprendidas
en mentes aventureras.
Benidorm luces y sombras
de un presente divertido,
gentes que a veces se asombran
de su clima bien venido.
Paraíso de Levante
con fiestas encantadoras,
que buscan en un instante
palabras arrolladoras.
Mirar tranquilo su cielo
para sentir la alegría,
mientras recibes consuelo
en perfecta sintonía.
Este Benidorm marchoso
con sendas de jubilados,
parece estar orgulloso
entre sueños anhelados.
Que no se rompa la noche
cuando el baile este sonando,
ni quieran ponerle broche
al sueño que va volando.
Benidorm tiene dulzura
a la vez de dar cansancio,
hay quien lo llama locura
por no conocer su espacio.
Cuando la tarde termina
entre nubes de emociones,
parece que se elimina
un montón de confusiones.
Benidorm como testigo
de muchos sueños gozosos,
el mar se vuelve un amigo
entre sueños primorosos.
G X Cantalapiedra.
Cuando la tarde termina
entre brisas soñadoras,
Benidorm lo determina
con sus marchas triunfadoras.
Entre playas de esperanza
con paciencia tentadora,
Benidorm tiene la danza
de su ambiente cualquier hora.
Música que va sonando
queriendo romper barreras,
con su marcha está logrando
hacer bellas las esperas.
Benidorm torres erguidas
entre brisas marineras,
con pasiones comprendidas
en mentes aventureras.
Benidorm luces y sombras
de un presente divertido,
gentes que a veces se asombran
de su clima bien venido.
Paraíso de Levante
con fiestas encantadoras,
que buscan en un instante
palabras arrolladoras.
Mirar tranquilo su cielo
para sentir la alegría,
mientras recibes consuelo
en perfecta sintonía.
Este Benidorm marchoso
con sendas de jubilados,
parece estar orgulloso
entre sueños anhelados.
Que no se rompa la noche
cuando el baile este sonando,
ni quieran ponerle broche
al sueño que va volando.
Benidorm tiene dulzura
a la vez de dar cansancio,
hay quien lo llama locura
por no conocer su espacio.
Cuando la tarde termina
entre nubes de emociones,
parece que se elimina
un montón de confusiones.
Benidorm como testigo
de muchos sueños gozosos,
el mar se vuelve un amigo
entre sueños primorosos.
G X Cantalapiedra.