Si bien con el Tratado de Tudilén ya se establecía en 1151 que la extensión de la Corona de
Aragón llegaría hasta el emirato de
Murcia, el acuerdo se revisó por del Tratado de Cazola (
Soria, 1179) entre Alfonso VIII de Castilla y Alfonso II de Aragón, estableciendo de forma genérica el límite en la frontera entre los emiratos de Dénia y de Murcia. Sin embargo, debido a la volatilidad e indefinición de las fronteras internas del al-Andalus, que dio lugar a confusiones y conflictos entre los monarcas católicos, el acuerdo se volvió a revisar con más detalle en el Tratado de Almizra firmado en 1244 entre los reyes de Castilla y de Aragón.