Pobres gallinas veían como tras el esfuerzo de poner los huevos, se los batian y a la sartén, pues estos (pescantes?) solian estar en frente del fuego.

(6 de Enero de 2010)

La hostia, Nacho, me das por todos los lados, pero he estado rebuscando en los diccionarios etnográficos del habla de los pueblos riojanos y no encuentro Cordovín. ¿Donde lo localizo?. Un chico de pueblo (chinche).
Joder Nacho, sigo releyendo el simplificado del escaño y nos estamos descojonando de risas. Eres genial o como dice mi amigo el vasco "eres la hostia". Sigue así, que contigo no hay penas y con el frio que hace entramos en calor. Un fuerte abrazo de un chinche de un pueblo.
Vaya foto preciosa y las ganas que tenia de encontrarla. Sabía que existia, pero no lo había visto nunca. Con esto en casa, no hacia falta marcar a las gallinas, ni discutir con la vecina, por si este huevo es de mi gallina o de la tuya (como no tenian marca los huevos). Unicamente que para meter los polluelos, tendrían que alambrar los barrotes.
Lo que comenta Nacho de "calentitos las pollas, los güevos y los pochuelos", serán de las gallinas de casa.. ja, ja, ja, ja o NO. Un abrazo y animaros.
Simplificando: Los escaños eran muy buenos para mantener "calentitos las pollas, los güevos y los pochuelos".
Más que un escaño-jaula parece un escaño-incuvadora, para que la gallina clueca enhuerara los huevos al calor del hogar.
Seguro que es el escaño de la abuela Bernarda, ¿no, Inma?