Tras la caída del Imperio de Occidente y el establecimiento de los reinos germánicos en
España, hacia el 550,
Cartagena fue conquistada por el emperador bizantino Justiniano I y renombrada como Carthago Spartaria. Flavio Pedro Sabacio Justiniano, más conocido como Justiniano I el Grande, fue emperador del Imperio
romano de Oriente desde el 1 de agosto de 527 hasta su muerte. Durante su reinado buscó revivir la antigua grandeza del Imperio romano clásico, reconquistando gran parte de los territorios perdidos del Imperio romano de Occidente.