Los Búhos. Parece que fue ayer…, MADRID

Los Búhos.
Parece que fue ayer… Y ya llevan 48 años con nosotros.
Fue el 1 de octubre de 1974 cuando comenzaron a funcionar 11 líneas de autobuses nocturnos en Madrid.
Una fenomenal respuesta de la Emt a las necesidades de muchos madrileños (que como yo) estábamos obligados a desplazarnos de madrugada por nuestro trabajo, y también, por el creciente ocio nocturno de la capital.
Aquellas primeras 11 líneas nocturnas comunicaban todos los días de la semana los barrios más alejados de la capital con el centro de la ciudad: Hortaleza, Canillejas, Moratalaz, Vallecas, San Cristóbal de los Ángeles, Villaverde Alto, Carabanchel, Cuatro Vientos, Lacoma, Fuencarral y Manoteras. Sus cabeceras estaban ubicadas en Cibeles (3), Callao (1) y Puerta del Sol (7). El billete costaba 15 pesetas.
A aquellos Autobuses Nocturnos, muy pronto, los madrileños les “bautizamos” con el nombre de “Búhos”.
Madrid fue creciendo… Y también la movilidad de su vida nocturna.
En 1994 la red de Autobuses Nocturnos se reordenó completamente, pasando de 11 a 20 líneas. Y todas la líneas ya tenían su cabecera en Cibeles, un lugar céntrico donde poder hacer transbordo de una línea a otra.
Con el tiempo se fueron creando más líneas nocturnas, hasta llegar a las 28 actuales.
Las líneas N1 a N24 conectan la periferia con Cibeles.
La línea N27 (el servicio nocturno de la línea Exprés Aeropuerto) conecta Cibeles con el Aeropuerto haciendo solo una parada intermedia junto a la estación de O'Donnell.
Las líneas N25 y N26 conectan Alonso Martínez con Villa de Vallecas y Aluche, respectivamente, aunque también pasan por Cibeles.
La línea N28 (la última línea nocturna creada) conecta Moncloa con Aravaca, siendo el único “Búho” que no se adentra en el centro de la ciudad.