La
fachada norte recae a la Gran
Vía y ha estado condicionada por la construcción de esta gran avenida. Así, el
ábside se recortó y modificó ligeramente; esta adaptación fue llevada a cabo por Carlos de Luque entre 1911 y 1916. Posteriormente fue Javier Feduchi Benlliure quien entre 1989 y 1991 rehízo la fachada, creando un
arco triunfal sobre el ábside que permite apreciar el exterior de la
cúpula.