Virgen de la Soledad o Virgen de la Paloma, MADRID

El cuadro que hoy podemos ver en el retablo del altar mayor data del siglo XVII. Se trata de la Virgen de la Soledad, muy venerada desde tiempos de Felipe II y de la cual existen muchas pinturas.
El cuadro se perdió durante años. En 1787 unos niños jugaban entre los escombros de un solar próximo a la calle de la Paloma y encontraron el lienzo abandonado. Por cierto que la calle de la Paloma se llama así por la paloma que se crió en unos corrales que hubo aquí antiguamente y que voló sobre la Virgen de las Maravillas cuando la trasladaron al convento de la calle de la Palma.
Una vecina, Isabel Tintero, se enteró del hallazgo y enseguida cambió el lienzo a los niños por unas monedas. Isabel limpió el lienzo y lo colocó en un retablo en el portal de su casa, en la calle de la Paloma. Aquí empezó a ser venerado por los lugareños como la Virgen de la Paloma.
(19 de Marzo de 2019)