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HOYO DE MANZANARES: EL LOBO FEROZ “CAIFAS” BAJO DE LA MONTAÑA. ...

EL LOBO FEROZ “CAIFAS” BAJO DE LA MONTAÑA.
“Es cuento”.
En la Sierra de La Tortuga, entre piedras gigantes y encinas endiabladas, un lobo feroz llamado Caifás, con su manada de lobos hambrientos se bajaron hasta las urbanizaciones de Hoyo de Manzanares, para poder comer algo que les hiciera sentirse mucho más cómodos, Caifás mandaba en tan preciada manada, que un domingo de primavera quisieron amedrentar a los moradores del Picazo y otras urbanizaciones, sin ningún temor ni miedo, los lobos aullando daban ese miedo que a los niños les deja en casa metidos esperando que se pase su furia. En Hoyo de Manzanares estaban acostumbrados a ver incluso en sus piscinas a los jabalís pequeños que iban a beber el agua dulce, más los lobos eran terriblemente mucho más agresivos, por los ojos parecían lanzar fuego, sus orejas tiesas como la de los perros podencos daban miedo y mucho respeto a todos los vecinos, que decidieron quedarse en sus pisos, al ver sus bocas con dentaduras de acero inoxidable, que podrían llevarse a una vida sin ningún problema, Los aullidos aumentaron, y la noche se venía encima, los lobos corriendo por los pasillos buscando algún animal o cualquier cosa que les matara su hambre, a veces trataron de romper puertas de la calle, pero se ve que no les agradaba ese modo de subir a las viviendas, después de una hora y pico amedrentando a los vecinos de esa localidad, parece que se subieron por el Pico del Picazo, mientras Algunos perros ladraban celebrando su huida, Las urbanizaciones clamaban seguridad, las piscinas nuevos cercos con vigilancia, mientras el Lobo Caifás disfrutaba de alguna pieza de caza menor, ya que los jabalís que reclamaban su territorio con ganas de invadirlo, dejaron marchar a esa manada de fieras hambrientas, que nadie sabe cuándo volverán hacer de las suyas, El lobo ibérico hoy día tiene mezcla de otras razas agresivas, que se han unido en sus escapadas a la sierra, y están dejando animales salvajes por algunos lugares de la sierra madrileña. Con el peligro añadido de sus descendientes, Habrá que estar vigilantes ante tan malas razas mezcladas. G X Cantalapiedra.