HOYO DE MANZANARES: NO ERA UNA BRUJA. ERA UNA ROSA....

NO ERA UNA BRUJA. ERA UNA ROSA.
En aquel pueblo de sierra
llegó una mujer hermosa,
que en su carácter encierra
la dulzura de una rosa.

Siendo maestra con cultura
de las que dejan sus huellas,
entre frases de dulzura
que siempre las vemos bellas.

Más un cacique del pueblo
pronto la quiere hacer suya,
y quiere alargar su cuello
demostrando su bravura.

Una rosa es otra cosa,
para no sentirse presa,
la maestra no es dichosa
ni quiere sentirse obesa.

El cacique mal metiendo
quiere imponer su dinero,
y al tiempo le van diciendo
que solo es rico usurero.

La maestra en su enseñanza
dejo saber en su entorno,
y logró buena balanza
respetando aquel contorno.

El cacique llamó bruja
otras muchas tonterías,
y su cabeza la estruja
para lograr groserías.

Una rosa caminando
era la dulce enseñanza,
el cacique fue dejando
su tan perdida templanza.

Amargado al verse solo
el cacique criticaba,
“que puede llegar el lobo
en cualquier zona habitada”.
G X Cantalapiedra.