ARANJUEZ: JARDÍN DE ARANJUEZ...

JARDÍN DE ARANJUEZ

Cada hoja, una palabra,
un libro, la biblioteca entera
en la copa de un árbol.
Un color, un gesto, una idea,
un parlamento, un hablante
cada rama de ese vivero
de troncos centenarios
y jóvenes pimpollos.
Una ciudad colmada de habitantes
que respiran, que transforman
la materia en vida a la vida.

Cada tallo es un gimnasio,
una fuente de sabia,
un almacén de sueños
que hacen de parador,
de aeropuerto, de mirador,
de tobogán, de trampolín.
Toda una feria de la vida,
un mundo de altas esperas,
altas horas de la noche
donde se funden los brotes
oscuros, en destellos de sol naciente
cada día que amanece
y la luz va dando forma a las cosas,
soltando con alas a la libertad
lo que la noche apresó
y comienzan a latir historias,
personajes que se mueven
en una reserva de oxígeno,
lanzando los sueños ocultos en sus hojas
donde la ternura tintinea,
en ejercicios masivos de emoción
de un corazón en la intemperie,
con fuentes de fuente mitológica,
chorros de agua, de energía,
de jarrones que atraparon el arte,
calles donde la perspectiva
juega a unir el infinito,
el arte de la forma,
y el juego del vegetal.

Este es mi relato y mi gratitud,
mi emoción como admirador
del jardín, el libro de la vida
con letras de renovación
en sus hojas de respuestas.