Gracias, me la tomare a tu salud, pero me tendrás que invitar porque yo soy una muerta de hambre, lástima que no todos poseamos tu exquisita educación.
Perdón por ser tan mentirosa, envidiosa, criticona, etc etc y haber molestado a tan altos cargos públicos y excelentes personas llenas de virtudes con mis sediciosos y malintencionados comentarios, sin ninguna base, ya que las peñas a las que han preguntado sin duda mienten, las personas que vieron la lista mienten, los que vieron que el seiscientos no merecía ganar se equivocan, los que creen que la carroza de las velas merecía más de un penúltimo puesto son fanáticos envidiosos, etc, etc, etc. Todos se equivocan, los demás siempre se equivocan y no merece la pena escucharles.
Lamento haberme quejado por el jurado, estaba muy bien escogido, basta con ver los resultados, y no volveré a quejarme por nada, ya que mi intelecto no alcanza para comprender las decisiones de alta política y asuntos de trascendental importancia, yo lo que me manden, y no volveré a intentar que el pueblos se divida y se destruya por mi culpa porque de todos es sabido la ancestral armonía que reina en este lugar.
Sin más presento mis respetos a todos aquellos que se creen con el derecho de menospreciar y despreciar a las personas por mostrar su opinión, sin ofender a nadie, cuando no coincide con la suya.
Perdón por ser tan mentirosa, envidiosa, criticona, etc etc y haber molestado a tan altos cargos públicos y excelentes personas llenas de virtudes con mis sediciosos y malintencionados comentarios, sin ninguna base, ya que las peñas a las que han preguntado sin duda mienten, las personas que vieron la lista mienten, los que vieron que el seiscientos no merecía ganar se equivocan, los que creen que la carroza de las velas merecía más de un penúltimo puesto son fanáticos envidiosos, etc, etc, etc. Todos se equivocan, los demás siempre se equivocan y no merece la pena escucharles.
Lamento haberme quejado por el jurado, estaba muy bien escogido, basta con ver los resultados, y no volveré a quejarme por nada, ya que mi intelecto no alcanza para comprender las decisiones de alta política y asuntos de trascendental importancia, yo lo que me manden, y no volveré a intentar que el pueblos se divida y se destruya por mi culpa porque de todos es sabido la ancestral armonía que reina en este lugar.
Sin más presento mis respetos a todos aquellos que se creen con el derecho de menospreciar y despreciar a las personas por mostrar su opinión, sin ofender a nadie, cuando no coincide con la suya.