No se por ahí Pepe, pero por aquí aún andamos por la playa, lo que pasa es que con tanta fiesta nos olvidamos de escribir, yo el primero, y mira que hay cosas para escribir de esta bendita tierra. Ahora andaríamos (como nuestra Piño) preparando el pesebre con el árbol, teixo, pino, acebo. Según cuenta la historia, el milagro; es que las manzanas eran de oro y las nueces de plata, esto no se hizo realidad en la Alta Sanabría porque no había otra fruta para comer en invierno y Dios lo sabia. Gracias a esos que plantáis manzanos y nueces en Padornelo yo aún saboreo esta deliciosa fruta.
Un saludo.
Un saludo.