En cada
familia se solía cebar uno o varios
cerdos para el consumo familiar.
Entre diciembre y enero se sacrificaba al animal, algunos lo hacían en la
plaza, donde hacían una
hoguera y lo chamuscaban para eliminar "LAS CERDAS".
Luego se llevaban a las
casas, una vez sangrados para su despiece y elaboración de embutidos "EL MONDONGO".