FUENTESPREADAS: S. RAMOS Un hombre de avanzada edad resultó herido...

S. RAMOS Un hombre de avanzada edad resultó herido ayer al ser sorprendido por uno de los novillos participantes en el encierro de Fuentespreadas, mientras estaba observando el espectáculo desde la carretera. Según indicaron testigos presenciales, esta persona sufrió un golpe en la cabeza al caer, aunque aparentemente el percance no parecía revestir gravedad. No obstante, una ambulancia de las dispuestas por la organización acercó al herido hasta el hospital de Zamora.

No había sol ni moscas, que parece lo propio de los espectáculos taurinos, según describen los entendidos, ya que la mayoría de estos eventos se celebran en el estío. Por el contrario el viento y, por rachas, la lluvia, daban cierto aspecto desapacible a la mañana, aunque fuera al final del todo, ya que a primera hora la temperatura y el ambiente eran más agradables.

El encierro de Fuentespreadas, protagonizado por dos novillos utreros en el camino de Avedillo, participaron decenas de caballistas y numerosos coches, tractores o quads hasta los que se aupaban cuadrillas enteras, respetando en todo momento la intervención de los jinetes, que siguiendo el ritual taurino jugaron con las dos grandes reses de los Hermanos Bragado desafiando así las fuerzas de los astados que presentaban una estampa desigual. Uno constituía un mayor riesgo por los embistes y quites a los que respondía, mientras la otra res se encontraba más floja y no acudía con tanta alegría al juego de los caballistas. Los jinetes se acercaban a los toros con ánimo de encauzarlos y de burlarlos a campo abierto emulando a los auténticos mayorales.

Vecinos de la localidad, de otros muchos pueblos de la comarca o de la vecina provincia de Salamanca se congregaban a partir de las diez de la mañana para participar de este evento taurino que por ser el último de la temporada tiene especial significado para la afición, más en un año en que los programas festivos de los pueblos han tenido a recortar los espectáculos taurinos, porque se llevan gran parte de la factura de las fiestas. Casi todos, eso sí, han mantenido algo. Un ejemplo es Fuentespreadas, que ha eliminado el festival que sí se celebró el año pasado, con cinco reses para toreros importantes, explicaba Gustavo Bragado, de la empresa Hermanos Bragado, una de las ganaderías de reses bravas que surte de ganado a corridas y todo tipo de eventos taurinos. Lo que no ha faltado es la suelta de vaquillas, como la que tenía lugar ayer tarde o el gran prix de las peñas «que estuvo muy bien organizado» y con el que disfrutaban los grandes grupos de peñistas que acudían a la plaza para pasar un buen rato, con el riesgo que supone sortear a la res. Para hoy, lunes, una comida popular en la plaza mayor y otra suelta de vaquillas pondrán el broche de oro a las fiestas en honor a Nuestra Señora del Rosario desarrolladas durante el fin de semana en Fuentespreadas.