No te sientas por encima de los demás, tampoco por debajo, simplemente estas donde tienes que estar. Por tu altitud y altanería te pierdes contemplar las gadañas, y con ellas cerca a veces en tardes de primavera al ponerse el sol sentir el olor de la hierba fresca te puedo asegurar que te pierdes algo bueno te lo digo yo, que soy el espíritu de la cantera.