LA OTRA HISTORIA DE LA SECA.
AQUELLA GENERACIÓN DE LOS AÑOS 1940 AL 1950.
Eran años de trabajo en la agricultura, desde niños éramos mano de obra familiar o barata, Tuvimos que hacer de todo para salir adelante, en mi Villa de la provincia de Valladolid, vimos a niños de nueve años ser unos pastorcillos, llamados zagales, cuidaban de un rebaño, y transportaban la leche de las ovejas a la lechería en burros con aguaderas, donde allí se fabrican los quesos. Queserías Maximo. En las huertas eran mano de obra de estar regando o quitando hierbas malas de las plantaciones de patatas o remolacha, En el mes de mayo muchos niños dejaban la escuela para irse a trabajar con sus familiares donde fueran necesarios. Todo nuestra juventud o niñez fue trabajar sin levantar la cabeza, en nuestras casas cuando no querías comer alguna cosa, siempre te decían tus padres, “Tenias que haber conocido la guerra para que comieras piedras”, Tenias en mente que el racionamiento estuvo presente en nuestra niñez. Mi padre fumador de vicio me llevaba con él a por tabaco del racionamiento, que era un paquete de picado y un librillo de zig zas, y así te dabas cuenta de lo que fueron aquellos años de hambre y miseria, Muchas familias que eran numerosas, tuvieron a sus hijas desde los diez años de niñeras, y los hijos de zagalillos, cuando nos fuimos haciendo mayores todos mis amigo que éramos unos diez, soñábamos con cambiar de vida, excepto dos, todos fuimos emigrantes forzosos. Que no nos agradaba aquella vida que quizá fuera cambiando de forma, aunque ninguno lamenta el salir de aquel Valle donde el caciquismo era su forma de gobernar la Villa, Todos mis amigos pensamos que algún día aquello sería una leyenda de olvidar, Varios amigos de aquellos descansan en otros lugares para toda la eternidad, Madrid. Calpe. Barcelona, La Seca, Todos ellos como yo soñamos con vivir en libertad y poder elegir a nuestros gobernantes, aunque algunas veces nos fallen, pero sin aguantar a caciques sin cultura ni respeto y mucho menos sin dignidad y empatía. De vez en cuando echamos la vista hacia el pasado, para no repetir aquella triste historia. G X Cantalapiedra. 26 – 12 – 2025.
AQUELLA GENERACIÓN DE LOS AÑOS 1940 AL 1950.
Eran años de trabajo en la agricultura, desde niños éramos mano de obra familiar o barata, Tuvimos que hacer de todo para salir adelante, en mi Villa de la provincia de Valladolid, vimos a niños de nueve años ser unos pastorcillos, llamados zagales, cuidaban de un rebaño, y transportaban la leche de las ovejas a la lechería en burros con aguaderas, donde allí se fabrican los quesos. Queserías Maximo. En las huertas eran mano de obra de estar regando o quitando hierbas malas de las plantaciones de patatas o remolacha, En el mes de mayo muchos niños dejaban la escuela para irse a trabajar con sus familiares donde fueran necesarios. Todo nuestra juventud o niñez fue trabajar sin levantar la cabeza, en nuestras casas cuando no querías comer alguna cosa, siempre te decían tus padres, “Tenias que haber conocido la guerra para que comieras piedras”, Tenias en mente que el racionamiento estuvo presente en nuestra niñez. Mi padre fumador de vicio me llevaba con él a por tabaco del racionamiento, que era un paquete de picado y un librillo de zig zas, y así te dabas cuenta de lo que fueron aquellos años de hambre y miseria, Muchas familias que eran numerosas, tuvieron a sus hijas desde los diez años de niñeras, y los hijos de zagalillos, cuando nos fuimos haciendo mayores todos mis amigo que éramos unos diez, soñábamos con cambiar de vida, excepto dos, todos fuimos emigrantes forzosos. Que no nos agradaba aquella vida que quizá fuera cambiando de forma, aunque ninguno lamenta el salir de aquel Valle donde el caciquismo era su forma de gobernar la Villa, Todos mis amigos pensamos que algún día aquello sería una leyenda de olvidar, Varios amigos de aquellos descansan en otros lugares para toda la eternidad, Madrid. Calpe. Barcelona, La Seca, Todos ellos como yo soñamos con vivir en libertad y poder elegir a nuestros gobernantes, aunque algunas veces nos fallen, pero sin aguantar a caciques sin cultura ni respeto y mucho menos sin dignidad y empatía. De vez en cuando echamos la vista hacia el pasado, para no repetir aquella triste historia. G X Cantalapiedra. 26 – 12 – 2025.