LAS MULAS Y MACHOS BURREÑOS
Hemos perdido el pasado, el tiempo vino dañando a todos los animales de tiro o labranza, Los machos burreños que parecían ser los animales de tiro más fuertes, no existen en esas tierras, las mulas o acémilas se fueron quitando con la llegada de los tractores, y los asnos o burros se fueron desapareciendo, ya tuvimos un maestro que nos lo decía muchas veces, Don Jesús Suarez Fernández, “vendrán los tractores y las personas que no se preparen para conducirlos tendrán en esta tierra muchos problemas”, No se equivocaba en nada, sus pronósticos se fueron haciendo día a día cada vez más realistas, Todo aquel ambiente de eras trillos, incluso vendimiadores va desapareciendo, La agricultura se ha modernizado, los trabajos tan duros del campo como era el segar, se quedó en el olvido, y solamente las viñas en espaldera, pueden ofrecer trabajo en algunas épocas del año, Cuando visito mi tierra que no son muchas veces, miro al campo para ver sus formas de labranza y producción de lo que se este labrando, Es complicado el poder vivir dignamente con unas obradas o hectáreas de tierra o unas viñas que hace unos años mantenían a una familia, Hoy parece distinto, por lo que me cuentan mis amigos de la infancia, incluso los pozos que daban agua para regar unas tierras de patatas o remolacha, se han secado la profundidad está en más de 500, metros por debajo del suelo, se entiende que algunas huertas de las que eran tradicionales por muchos años, solo sean viviendas para personas que las ocupan casi siempre en verano, La Seca no debe de ser diferente a otros términos del entorno, los manantiales que estaban muy cercanos se han agotado, y ahora son otros problemas los que tiene la labranza, Adiós a las norias, adiós a los pozos artesianos, adiós a mulas, machos burreños, asnos y herramientas como el legón, hoy corren otros tiempos, no sé si mejor o peor, pero son otras circunstancias las que se viven. G X Cantalapiedra. 28 – 9 – 2025.
Hemos perdido el pasado, el tiempo vino dañando a todos los animales de tiro o labranza, Los machos burreños que parecían ser los animales de tiro más fuertes, no existen en esas tierras, las mulas o acémilas se fueron quitando con la llegada de los tractores, y los asnos o burros se fueron desapareciendo, ya tuvimos un maestro que nos lo decía muchas veces, Don Jesús Suarez Fernández, “vendrán los tractores y las personas que no se preparen para conducirlos tendrán en esta tierra muchos problemas”, No se equivocaba en nada, sus pronósticos se fueron haciendo día a día cada vez más realistas, Todo aquel ambiente de eras trillos, incluso vendimiadores va desapareciendo, La agricultura se ha modernizado, los trabajos tan duros del campo como era el segar, se quedó en el olvido, y solamente las viñas en espaldera, pueden ofrecer trabajo en algunas épocas del año, Cuando visito mi tierra que no son muchas veces, miro al campo para ver sus formas de labranza y producción de lo que se este labrando, Es complicado el poder vivir dignamente con unas obradas o hectáreas de tierra o unas viñas que hace unos años mantenían a una familia, Hoy parece distinto, por lo que me cuentan mis amigos de la infancia, incluso los pozos que daban agua para regar unas tierras de patatas o remolacha, se han secado la profundidad está en más de 500, metros por debajo del suelo, se entiende que algunas huertas de las que eran tradicionales por muchos años, solo sean viviendas para personas que las ocupan casi siempre en verano, La Seca no debe de ser diferente a otros términos del entorno, los manantiales que estaban muy cercanos se han agotado, y ahora son otros problemas los que tiene la labranza, Adiós a las norias, adiós a los pozos artesianos, adiós a mulas, machos burreños, asnos y herramientas como el legón, hoy corren otros tiempos, no sé si mejor o peor, pero son otras circunstancias las que se viven. G X Cantalapiedra. 28 – 9 – 2025.