HAY MISTERIOS QUE NO SE DIVISAN
Hubo noches de misterio entre sombras marginadas, tuvieron brisas en serio con sus voces desgarradas. Callejones que perduran por esas tierras mundanas, olvidos que no se curan y que acuden las mañanas. La noche siguió marchando, por caminos renegados, los ruidos iban llegando, dejando tristes sembrados. Hay noches que van corriendo entre sombras admiradas, hay corazones fingiendo que lloran en sus almohadas. Noches que miran al cielo con sus nubes destacadas, habrá quien busque el consuelo de sus tan torpes andadas. Los misterios se amontonan, y hay voces encandiladas, las brujas no solucionan las penas amontonadas. La noche lo va envolviendo, el miedo tiene ventaja, la conciencia va sufriendo el brillo de una navaja. Hay misterios que se guardan, y penas que bien se callan, a veces sueños se escapan más allá de las murallas. Misterios que van volando, misterios que son canallas, por detrás vienen dejando sonidos de ciertas trallas. Los misterios se amontonan en las noches complicadas, casi nunca solucionan las penas desesperadas. Hay colores en la noche que buscan siempre alborada, pudiera ser el derroche de otra vida imaginada. La tarde vino deprisa, el viento dejó emboscada, la noche trajo esa brisa de mujer enamorada. Dejar que la noche marche buscando casa encantada, quizá la sombra remache una ilusión demacrada. No hay besos en la distancia que se aprecien con amores, dicen que la intolerancia pudiera arrastrar dolores. G X Cantalapiedra.
Hubo noches de misterio entre sombras marginadas, tuvieron brisas en serio con sus voces desgarradas. Callejones que perduran por esas tierras mundanas, olvidos que no se curan y que acuden las mañanas. La noche siguió marchando, por caminos renegados, los ruidos iban llegando, dejando tristes sembrados. Hay noches que van corriendo entre sombras admiradas, hay corazones fingiendo que lloran en sus almohadas. Noches que miran al cielo con sus nubes destacadas, habrá quien busque el consuelo de sus tan torpes andadas. Los misterios se amontonan, y hay voces encandiladas, las brujas no solucionan las penas amontonadas. La noche lo va envolviendo, el miedo tiene ventaja, la conciencia va sufriendo el brillo de una navaja. Hay misterios que se guardan, y penas que bien se callan, a veces sueños se escapan más allá de las murallas. Misterios que van volando, misterios que son canallas, por detrás vienen dejando sonidos de ciertas trallas. Los misterios se amontonan en las noches complicadas, casi nunca solucionan las penas desesperadas. Hay colores en la noche que buscan siempre alborada, pudiera ser el derroche de otra vida imaginada. La tarde vino deprisa, el viento dejó emboscada, la noche trajo esa brisa de mujer enamorada. Dejar que la noche marche buscando casa encantada, quizá la sombra remache una ilusión demacrada. No hay besos en la distancia que se aprecien con amores, dicen que la intolerancia pudiera arrastrar dolores. G X Cantalapiedra.