CUANDO SON SUEÑOS AMARGOS
Me comentaba llorando en una noche de niebla, que su camino endiablado con cualquier humano tiembla, eras gestos desgarrados, era sufrir un infierno, era verse abandonado sin lograr amor eterno. La noche la fui notando como una noche de perros, no sé lo que fue pasando por debajo de los cerros. No quise escuchar sus frases cargadas de malos vientos, ni pensar si existen bases para tantos sufrimientos. Cuantos sueños son amargos, cuantas noches con desvelos, existen caminos largos que jamás darán consuelos. Cuando buscas las raíces de frases que buscan vuelo, renacen las cicatrices y quieres mirar al suelo. Cuantos caminos amargos pudieran dejar los celos, sin existir pasos largos ni bruja de largos vuelos. La noche viene entoldada, que tristes los rascacielos, la vida si es alocada suele rogar a los cielos. Entre los sueños amargos resplandecen los luceros, no sirven los tragos largos si brillan los embusteros. Hay noches que llaman negras, cuando miramos al cielo, dicen que llegan las fieras con traje de terciopelo. La noche viene marcando senderos que son inciertos, mientras les siguen llorando al ver que surgen los muertos. La guadaña va brillando camino del cementerio, algunos siguen pensando que lo tomaran en serio. Cerrar la puerta deprisa, cerrar la puerta corriendo, la muerte que nunca avisa dice que llega fingiendo. Dicen que suenan campanas y están los campos desiertos, en estas frías mañanas pudieran hablar de muertos.
G X Cantalapiedra.
Me comentaba llorando en una noche de niebla, que su camino endiablado con cualquier humano tiembla, eras gestos desgarrados, era sufrir un infierno, era verse abandonado sin lograr amor eterno. La noche la fui notando como una noche de perros, no sé lo que fue pasando por debajo de los cerros. No quise escuchar sus frases cargadas de malos vientos, ni pensar si existen bases para tantos sufrimientos. Cuantos sueños son amargos, cuantas noches con desvelos, existen caminos largos que jamás darán consuelos. Cuando buscas las raíces de frases que buscan vuelo, renacen las cicatrices y quieres mirar al suelo. Cuantos caminos amargos pudieran dejar los celos, sin existir pasos largos ni bruja de largos vuelos. La noche viene entoldada, que tristes los rascacielos, la vida si es alocada suele rogar a los cielos. Entre los sueños amargos resplandecen los luceros, no sirven los tragos largos si brillan los embusteros. Hay noches que llaman negras, cuando miramos al cielo, dicen que llegan las fieras con traje de terciopelo. La noche viene marcando senderos que son inciertos, mientras les siguen llorando al ver que surgen los muertos. La guadaña va brillando camino del cementerio, algunos siguen pensando que lo tomaran en serio. Cerrar la puerta deprisa, cerrar la puerta corriendo, la muerte que nunca avisa dice que llega fingiendo. Dicen que suenan campanas y están los campos desiertos, en estas frías mañanas pudieran hablar de muertos.
G X Cantalapiedra.