LA SECA PENSANDO EN LA PEÑA
Como camino soñado
es el Camino La Peña,
mucha gente lo ha pisado
entre su brisa risueña.
Vivir esa romería
mientras contemplas el Duero,
queriendo ver armonía
sin hablar del ROMANCERO.
Viviendo las tradiciones
de muchos siglos pasados,
se suelen vivir razones
con sueños medio endiablados.
Toda la comarca quiere
el vivir la romería,
es algo que se prefiere
en cualquiera fecha fría.
Cuando se pisa La Peña
entre brisas de septiembre,
la vida la ves risueña
mucho mejor que en noviembre.
La vida te va marcando
sus costumbres placenteras,
el tiempo sigue pasando
sin conocer las quimeras.
Tordesillas mira al cielo
con sus costumbres pasadas,
que quizá borren consuelo
en muchas de sus jornadas.
La Peña sigue su mundo
de pasiones encendidas,
y nadie lo ve un absurdo
si son fiestar elegidas.
G X Cantalapiedra.
Como camino soñado
es el Camino La Peña,
mucha gente lo ha pisado
entre su brisa risueña.
Vivir esa romería
mientras contemplas el Duero,
queriendo ver armonía
sin hablar del ROMANCERO.
Viviendo las tradiciones
de muchos siglos pasados,
se suelen vivir razones
con sueños medio endiablados.
Toda la comarca quiere
el vivir la romería,
es algo que se prefiere
en cualquiera fecha fría.
Cuando se pisa La Peña
entre brisas de septiembre,
la vida la ves risueña
mucho mejor que en noviembre.
La vida te va marcando
sus costumbres placenteras,
el tiempo sigue pasando
sin conocer las quimeras.
Tordesillas mira al cielo
con sus costumbres pasadas,
que quizá borren consuelo
en muchas de sus jornadas.
La Peña sigue su mundo
de pasiones encendidas,
y nadie lo ve un absurdo
si son fiestar elegidas.
G X Cantalapiedra.