SE NOS TERMINA LA SEMANA SANTA
Eran tiempos de “La Pedrada”, donde Gabriel y Galán, nos despertaba de aquel tiempo, donde nadie sabía dónde caminaba, Aquel poema nos dejó huellas muy profundas, a los castellanos de entonces, cuantas veces releí ese poema, que venía en la enciclopedia de Los Hermanos Álvarez. Me parece de vez en cuando que le tengo delante de mí, y puedo releerle cuantas veces quiera. Cuando tienes nueve o diez años, todo en la vida te parece nuevo, y sientes la necesidad de enterarte de lo que los poetas y pensadores nos informaban, Sentí en mi pecho aquel poema desgarrado, lleno de conciencia castellana, aquel niño que lanzo la pedrada, viendo al soldado como maltrataba a Jesucristo, y la conciencia de nacer en un pueblo castellano, donde vivían los hermanos en república cristiana. Y donde se aprendía amar, y como amar es llorar, el niño aquel del poema, sufría su sensación de defender a los oprimidos, como fue Jesucristo al ser crucificado. Cuantas veces me acorde durante mi vida de mayor, de dicho poema, que aprendí casi entero de memoria. Eran otros tiempos, otras costumbres, y otras personas que quizá ya no vivan, pero aun quedamos muchos niños de entonces, que sentimos ese poema como si fuera nuestra historia de entonces. Gabriel y Galán, Maestro sin ejercer, pero maestro en la poesía rural, y recuerdo sus poemas en dicha enciclopedia, como era El Embargo, o el Niño que cuida mis Cabras, que sensación de sentir la verdad en poesía, Hoy corren nuevos vientos, hoy quizá se reclama una Escalera para subir al Madero, para quitarle los clavos al Jesús El Nazareno. Que Antonio Machado nos dejó sus sentimientos humanos, cambian las generaciones, pero los niños se llenan de emociones, cuando les cuentan las verdades de otros tiempos sigilosos, donde los hombres quizá eran más cristianos que ahora, pero los poetas siempre han comentado las angustias del pueblo, cuando se ve sufrir a todo el entorno, sin poder evitarlo, como hoy día vemos al pueblo Ucraniano, que sufre lucha y muere, por conseguir su libertad e independencia, muriendo muchos seres humanos, en sus propias viviendas, y los campos de batalla. Donde se pierde la vida entre bombas y metralla. Que nuestra memoria siga activa, para seguir recordando a quien siempre puso su mirada en los derechos del pueblo, G X Cantalapiedra.
Eran tiempos de “La Pedrada”, donde Gabriel y Galán, nos despertaba de aquel tiempo, donde nadie sabía dónde caminaba, Aquel poema nos dejó huellas muy profundas, a los castellanos de entonces, cuantas veces releí ese poema, que venía en la enciclopedia de Los Hermanos Álvarez. Me parece de vez en cuando que le tengo delante de mí, y puedo releerle cuantas veces quiera. Cuando tienes nueve o diez años, todo en la vida te parece nuevo, y sientes la necesidad de enterarte de lo que los poetas y pensadores nos informaban, Sentí en mi pecho aquel poema desgarrado, lleno de conciencia castellana, aquel niño que lanzo la pedrada, viendo al soldado como maltrataba a Jesucristo, y la conciencia de nacer en un pueblo castellano, donde vivían los hermanos en república cristiana. Y donde se aprendía amar, y como amar es llorar, el niño aquel del poema, sufría su sensación de defender a los oprimidos, como fue Jesucristo al ser crucificado. Cuantas veces me acorde durante mi vida de mayor, de dicho poema, que aprendí casi entero de memoria. Eran otros tiempos, otras costumbres, y otras personas que quizá ya no vivan, pero aun quedamos muchos niños de entonces, que sentimos ese poema como si fuera nuestra historia de entonces. Gabriel y Galán, Maestro sin ejercer, pero maestro en la poesía rural, y recuerdo sus poemas en dicha enciclopedia, como era El Embargo, o el Niño que cuida mis Cabras, que sensación de sentir la verdad en poesía, Hoy corren nuevos vientos, hoy quizá se reclama una Escalera para subir al Madero, para quitarle los clavos al Jesús El Nazareno. Que Antonio Machado nos dejó sus sentimientos humanos, cambian las generaciones, pero los niños se llenan de emociones, cuando les cuentan las verdades de otros tiempos sigilosos, donde los hombres quizá eran más cristianos que ahora, pero los poetas siempre han comentado las angustias del pueblo, cuando se ve sufrir a todo el entorno, sin poder evitarlo, como hoy día vemos al pueblo Ucraniano, que sufre lucha y muere, por conseguir su libertad e independencia, muriendo muchos seres humanos, en sus propias viviendas, y los campos de batalla. Donde se pierde la vida entre bombas y metralla. Que nuestra memoria siga activa, para seguir recordando a quien siempre puso su mirada en los derechos del pueblo, G X Cantalapiedra.