MEJOR SIN SALVADORES
No queremos salvadores con su cultura extremista, soñamos con los amores que nos alegra la vista. No queremos salvadores que serán oportunistas, ni tampoco ser deudores de las gentes tremendistas. Caminar buscando amores para seguir disfrutando, de los bonitos candores que la vida te va dando, Entre los vientos del norte los fríos van arreciando, el viento traza el resorte para seguir caminando, Fechas llenas de nostalgia con los fríos machacando, a veces parece magia que pudieras ir copiando. Salvadores de sus cuentas que solo lanzan mentiras, muchas frases las revientan cuando los vientos se giran. Que no vengan predicando sus perfectas soluciones, a veces van confinando muchas y malas razones. Endiablados sin sentido para seguir engañando, en su camino elegido quizá vayan tropezando. Nunca busque salvadores ni adivinos del mañana, me hablaron de los señores que no tienen vida sana. Pregonando sus andanzas entre sucias soluciones, nunca sabrán de templanzas ni de lograr sensaciones. Deja que acabe la tarde sin esperar nada raro, el respetar no es en balde ni te da el camino claro. Salvadores que castigan a sus viejos compañeros, marcándoles las fatigas y gastando sus dineros. Sin saber dónde caminan en sus tardes depresivas, muchas veces determinan que sus rutas son activas. G X Cantalapiedra.
No queremos salvadores con su cultura extremista, soñamos con los amores que nos alegra la vista. No queremos salvadores que serán oportunistas, ni tampoco ser deudores de las gentes tremendistas. Caminar buscando amores para seguir disfrutando, de los bonitos candores que la vida te va dando, Entre los vientos del norte los fríos van arreciando, el viento traza el resorte para seguir caminando, Fechas llenas de nostalgia con los fríos machacando, a veces parece magia que pudieras ir copiando. Salvadores de sus cuentas que solo lanzan mentiras, muchas frases las revientan cuando los vientos se giran. Que no vengan predicando sus perfectas soluciones, a veces van confinando muchas y malas razones. Endiablados sin sentido para seguir engañando, en su camino elegido quizá vayan tropezando. Nunca busque salvadores ni adivinos del mañana, me hablaron de los señores que no tienen vida sana. Pregonando sus andanzas entre sucias soluciones, nunca sabrán de templanzas ni de lograr sensaciones. Deja que acabe la tarde sin esperar nada raro, el respetar no es en balde ni te da el camino claro. Salvadores que castigan a sus viejos compañeros, marcándoles las fatigas y gastando sus dineros. Sin saber dónde caminan en sus tardes depresivas, muchas veces determinan que sus rutas son activas. G X Cantalapiedra.