LA SECA: LOS VIÑEDOS QUEDAN SOLOS...

LOS VIÑEDOS QUEDAN SOLOS
Cuando pasa la vendimia con sus buenas relaciones, puede llegar cierta lluvia que produce sensaciones. Los viñedos van perdiendo sus verdes tan naturales, los marrones van viniendo en los otoños normales. Los viñedos quedan tristes, que serios están los campos, en los otoños persisten algunos sufridos llantos. La Seca tiene viñedos por sus más bonitos llanos, donde los vientos son credos que hacen grande a los hermanos. Labradores de esperanzas, hombres que quieren su tierra, trabajadores sin danzas que su futuro no cierra. Señores de la labranza, fundidos de sensaciones, que no quieren la tardanza ni las malas intenciones. Los viñedos solitarios en estos campos hermosos, que pueden darte calvarios en momentos horrorosos. Cuando los llanos abundan, con los pinares de fondo, las viñas siempre fecundas no quieren ser un recodo. Los campos tienen colores que se vuelven penitentes, dicen que sufren dolores al ver que faltan sus gentes. Rasos, laderas y barcos, hacen bellos los caminos, donde no se ven atascos, tan solo se sueñan vinos. El otoño va llegando con sus fríos castellanos, los campos viven clamando por ver los seres humanos. Soledades lasecanas con muchas contradicciones, sin pensar en cosas vanas se viven las emociones. Los solitarios caminos que llegan a las cañadas, pueden ser los desatinos de las frías madrugadas. Campos que siguen marcando las horas más especiales, La Seca sigue nombrando a sus lugares normales. Labradores de esperanza con sus intenciones sanas, a veces hacen balanza de ciertas cosechas vanas. El mañana va llegando sin marcar ningún destino, las viñas vienen dejando soñar con el vino fino. G X Cantalapiedra.