SANTA AGUEDA EN LA SECA
Eran años siempre duros
sin tener muchas pesetas,
fueron momentos oscuros
con sus noches tan inquietas.
Prólogo de carnavales
en estas fechas maltrechas,
eran tiempos anormales
que dejaron ciertas brechas.
Mujeres que fueron brillos
de esa raza lasecana,
que con sus gestos sencillos
alegraron la mañana.
Guardando las tradiciones
en la Villa Lasecana,
entre rezos y razones
fueron mucha gente humana.
Sin imponer condiciones
el ambiente fue flotando,
dejando sus emociones
cuando lo fueron bailando.
Lasecanas con razones
de vivir su nuevo mundo,
marcando las ilusiones
sin imponer el absurdo.
Los complejos se borraban
en aquellas soluciones,
y los hombres celebraban
ver mujeres con lecciones.
Eran años de censura
con las leyes machacando,
dicen que fueron locura
los gritos que fueron dando.
Sin olvidar sus motivos
de ser mujeres muy dignas,
hicieron estos festivos
sin hablar de sus cocinas.
G X Cantalapiedra.
Eran años siempre duros
sin tener muchas pesetas,
fueron momentos oscuros
con sus noches tan inquietas.
Prólogo de carnavales
en estas fechas maltrechas,
eran tiempos anormales
que dejaron ciertas brechas.
Mujeres que fueron brillos
de esa raza lasecana,
que con sus gestos sencillos
alegraron la mañana.
Guardando las tradiciones
en la Villa Lasecana,
entre rezos y razones
fueron mucha gente humana.
Sin imponer condiciones
el ambiente fue flotando,
dejando sus emociones
cuando lo fueron bailando.
Lasecanas con razones
de vivir su nuevo mundo,
marcando las ilusiones
sin imponer el absurdo.
Los complejos se borraban
en aquellas soluciones,
y los hombres celebraban
ver mujeres con lecciones.
Eran años de censura
con las leyes machacando,
dicen que fueron locura
los gritos que fueron dando.
Sin olvidar sus motivos
de ser mujeres muy dignas,
hicieron estos festivos
sin hablar de sus cocinas.
G X Cantalapiedra.