CASA DE MARIANO SANZ
Casa de campo bonita
con sus vistas lasecanas,
hay una historia que grita
al ver las ruinas tan vanas.
La Seca guarda silencio,
mientras La Casa se aplana,
tan solo queda el desprecio
de ver que nadie se afana.
En la soledad más grande
La Casa desaparece,
al ver su pasado en balde
viendo que nadie padece.
Soledades y misterios
que miran al Campo Santo,
Caminos que fueron serios
cuando recibieron llanto.
La Seca sigue callando
sin importarle su ruina,
al tiempo que va mirando
si existe la voz divina.
Los recuerdos son motivos
para seguir adelante,
con todos los adjetivos
sin ver normas al instante.
La voz del destino grita
y es una voz delirante,
mientras La Casa se agita
al ver su ruina constante.
Hay recuerdos en la vida
que nadie debe ocultarlos,
esta Casa fue elegida
por sus campos al cuidarlos.
Mariano Sanz fue su dueño
que supo dejar historia,
hoy tan solo es un empeño
al ver que acabó su gloria.
G X Cantalapiedra.
Casa de campo bonita
con sus vistas lasecanas,
hay una historia que grita
al ver las ruinas tan vanas.
La Seca guarda silencio,
mientras La Casa se aplana,
tan solo queda el desprecio
de ver que nadie se afana.
En la soledad más grande
La Casa desaparece,
al ver su pasado en balde
viendo que nadie padece.
Soledades y misterios
que miran al Campo Santo,
Caminos que fueron serios
cuando recibieron llanto.
La Seca sigue callando
sin importarle su ruina,
al tiempo que va mirando
si existe la voz divina.
Los recuerdos son motivos
para seguir adelante,
con todos los adjetivos
sin ver normas al instante.
La voz del destino grita
y es una voz delirante,
mientras La Casa se agita
al ver su ruina constante.
Hay recuerdos en la vida
que nadie debe ocultarlos,
esta Casa fue elegida
por sus campos al cuidarlos.
Mariano Sanz fue su dueño
que supo dejar historia,
hoy tan solo es un empeño
al ver que acabó su gloria.
G X Cantalapiedra.