LA SECA: LA SECA. CUANDO SE HUNDIAN LAS BODEGAS Y SUS CASAS...

LA SECA. CUANDO SE HUNDIAN LAS BODEGAS Y SUS CASAS

Corrían los años 1960, cuando la villa de La Seca, conoció su más terrible castigo, Las bodegas que ocupaban la mayoría del subsuelo de aquel valle, se vieron inundadas por las crecidas de las aguas subterráneas, Fueron varias las casas que se hundieron, aunque no hubo que lamentar ninguna muerte por tan desgraciada situación, para completar aquellas penosas tragedias, el Ayuntamiento con sus escuelas y demás locales, se incendiaron sobre las tres de la madrugada del día 3, de enero de 1961, fueron pacto de las llamas, y teniendo que ser trasladado el Ayuntamiento al local de la Cilla, al año siguiente, a finales de enero se hundía la parte alta de la torre, alcanzando a todo el altar mayor de la Iglesia parroquial y dejándola en un estado lamentable.
La Seca que entonces estaba sufriendo la cruel emigración, se vio además sorprendida por todos los acontecimientos, de ruina y abandono de edificios públicos como el Hospital, ermita de San Roque, e incluido las tapias del Cementerio que estuvieron bastante tiempo caídas en algunos trozos. Las personas que entonces vivíamos en La Seca, sentíamos como si fuera un lugar donde solo las desgracias tenían que sufrirse en cada domicilio donde existieran bodegas, se trato una a una de sacar el agua que tenían dentro, para comprobar si estaban dañadas por la humedad acumulada. Se hizo un esfuerzo para poder aminorar los daños, y en aquel tiempo se promovió el barrio nuevo, de las eras de la Bodega Cooperativa, como se llamaban popularmente en aquel tiempo. Las maquinas excavadoras, hicieron una gran zanja por el camino de La Perdiz adelante, buscando una salida a tan grande inundación. Quizá el tiempo que duro el agua en las bodegas, fuera de unos dos años por lo menos, en la parte de La Seca donde las casas estaban mas cerca de la calle del Cristo. Donde varias casas desaparecieron dejando ver su ruina. La gente joven de aquella época, se sentía preocupada, cada vez que la casa producía cualquier ruido, estaba todo el personal alerta por si pudiera venirse abajo y producir la catástrofe. En aquella época, un tractorista conduciendo su tractor, en lo que había sido el frontón de “Camaño” vio como terminaba en la bodega, sin poder reaccionar ante tal situación, con la suerte que solo sufrió magulladuras en su cuerpo. Fueron varios los casos de buena suerte, para no tener que contar ningún fallecimiento. La Seca hoy solo las personas mayores de 60, años, pueden recordar todo aquel calvario, que se vivió, en aquellas fechas penosas. Aunque no hace muchos años, una joven doctora termino hundiéndose el patio de su casa, y acabando enterrada en su propia bodega. Son episodios que La Seca debiera tener presente, ya que la villa se encuentra en su parte antigua, las casas sobre sus propias bodegas, y sabiendo que hoy en día no tienen apenas uso, pueden ocurrir cualquier tema doloroso. Que seria bueno el poderlo controlar. G X Cantalapiedra.