CUENCA DE CAMPOS: RESPUESTA al mensaje 06/11:...

RESPUESTA al mensaje 06/11:
Yo también me refugié en la noche y en muchos días.
Yo también me refugiaba en las noches largas, frente a las estrellas, y me preguntaba si Dios estaba mas allá de ellas, o entre ellas... Y me hacía multitud de preguntas, cuando ya la claridad se asomaba por el Este y se borraban poco a poco las estrellas. De aquel instante, nacía otra pregunta: ¿Porqué en este momento, tengo frío, y dentro de unas horas, el Sol quemará mi espalda?-"De los que SE HABÍAN MARCHADO, "algunos" habían regresado;, entre ellos el autor de mis días y me llevaba con él porque había que recoger la mies- Me sentí mucho tiempo extraviado con tanta pregunta.
Yo era aprendiz de campesino: se era "este oficio". entonces, desde el momento en que empezabas a dar los primeros pasos, que... tambaleantes en otros sentidos los fueron mucho tiempo. Yo era un niño a quien unos hombres, vestidos de soldado, me llevaban de la mano, eran muy bueno con migo y con mi madre a la que ayudaban en las faenas del campo...
Crecí y me dijeron luego, que aquellos eran hombres malos, y que no rezaban nunca...! Mentira-respondí un día a mi abuela- Yo al que me lleva siempre que vamos al campo, le vi un día rezar, tras un roble, y... y también rezaba,-añadí-
Bueno, bueno, -dijo mi abuela- ahora calla... ya te contaré algún día, si es que no lo aprendes por ti mismo.
Y pasaron algunos veranos mas, contemplando esas hermosas estrellas que luego me robó la ciudad. Y me preguntaba por Dios, y me lo explicaban de un modo que me costaba entender, su generosidad, para conmigo... Yo entonces rezaba, y mucho,: rezaba en los campos ayudando a mi padre, desde el día que llegó, que tampoco me explicaron DE DONDE... Y le pregunte: ¿Tu también fuiste como esos soldados, que había en el pueblo, y que dice "todo el mundo" eran malos? Me dio una respuesta parecida a la abuela. Y... callé: callé porque entonces los niños escuchaban mucho mas que hoy a los mayores, y porque detrás del pan no quedaba tiempo para muchas preguntas.
Han sido escenas que hieren, implacables, que te acompañan siempre... sobre todo cuando unas imágenes te muestran un niño desnudo, flacas sus piernas, su vientre abultado deformado, deformado y sin sonrisa. Y sientes: Y sientes la necesidad de contarte "este cuento, para escucharte a ti mismo y por si alguien escucha. Por si alguien, alguna vez se acerca, hasta aquel que aprende a sufrir carencias desde muy temprano. Y tal vez ya no te preguntes, por aquellas estrellas sin respuesta. Si vas conociendo la desesperanza y que ALGUIEN se empeña e que no haya Reyes Magos para todos los niños, y si hay empeño en el hombre en sembrar de minas los campos, allá donde los niños aprenden a jugar con fusiles.
LIBERTAD.


5 Cts/kWh para tarifa 3.0 TD, autónomos y empresas
Llama al 654 409 325, ofertas especiales para Pueblos de España