Compramos energía a futuro



La fuente preferida de Lola. Mira que hay fuentes en Blacos, hambre no sé pero sed fijo que no se pasa, pena que alguna no sea de cerveza o vino Ribera del duero, seguro que entonces no estarían tan abandonadas.
Hay que joderse el vicio que hay. Entre los usos y costumbres del pueblo está el guiñote, que gusta más que a un tonto los palotes. Como no podía ser de otra manera en la comida de Semana Santa hubo campeonato. Y como se puede ver la cantera no desfallece y está garantizado la supervivencia de uno de los deportes preferidos de Blacos.
me lo pedia el cuerpo, o el alma, necesitaba pisar aquellos paisajes que por los años 70, eran mi zona de ocio, de mis primeros paseos románticos, de las largas conversaciones con las amigas, siempre al lado de una fuente, pues podíamos denominar al Blacos de entonces como el pueblo de las mil fuentes.
LA Fuente negrilla, era la fuente de mi barrio, era un poco mas mía, ayi siempre bajabamos con cubos a por agua para los animales, e invariablemente me tropezaba con mis vecinos, que no eran vecinos ... (ver texto completo)
Hace unos cuantos años, allá por el invierno de los 60, Blacos era un pueblo encogido en sí mismo. Sus calles se iluminaban con lámparas de una sola bombilla, alimentadas por la escasa fuerza que llegaba desde el viejo molino. En las casas no había grifos, y el que quería beber agua se iba a la fuente, y el que quería que bebieran sus animales, se los llevaba directamente al río. En aquellos años los lavabos eran palanganas, las bañeras había que buscarlas en los remansos del avión, y los retretes ... (ver texto completo)
Entre garbanzos

La vista hipnotizada sobre el plato. Garbanzos con bacalao hasta el borde. A derecha e izquierda los cubiertos, y enfrente, cerrando el triángulo, el vaso de vino aderezado con un poco de gaseosa para hacer más suave el trago. También se admite agua, u otros refrescos. En la variedad está el gusto. Esto es lo que nos ofrece la mesa. Pero en las sillas hay algo más. Separados por la tenue frontera de una camisa, el día es casi de verano, se rozan diferentes mundos que el resto del ... (ver texto completo)
Fiestas y costumbres. No sé si esto es más una fiesta o una costumbre, lo que sí sé es que no falta en Semana Santa de unos años para acá. Y que el viacrucis ha recaído sobre la Chus y sus acólitas, mejor, así mientras están entretenidas preparando el condumio no pecan las muy jodidas. Ya se sabe que cuando el diablo se aburre espanta las moscas con el rabo.
Una oscuridad tranquila lo invadía ya todo. En los oídos todavía resonaba el murmullo de una comida multitudinaria, la cancioncilla de los juegos de niños o la conversación al calor de una taza de café. En la noche del primer lunes después de Semana Santa, Blacos volvía a su letargo habitual. El único movimiento era el de un gato que se desperezaba en la esquina del patio después de restregarse sobre la pared de la iglesia. Era una noche tan tranquila que el humo que salía de la chimenea de la escuela ... (ver texto completo)
Bueno, ya queda poco para vernos las caras en ese pueblucho llamado Blacos. Gracias a Dios o a Eolo, todavía no lo tengo claro, las temperaturas han ido subiendo y para esta Semana Santa vamos a tener un tiempo bastante aceptable. Por lo que leo puede que el viernes nos juntemos para pecar alrededor de una mesa, si es así apunta a dos pecadores de Baraka en la lista, Chus.

La Chus está viendo el Canal Gourmet y su compañero le dice:
- ¿Para qué ves eso si no sabes cocinar?... Y ella contesta:
- ... (ver texto completo)
La Cocinera Celestial
La pregunta más habitual estos días, no me cabe la menor duda, de los que vienen a Blacos a pasar la Semana Santa es ésta ¿Va a preparar comida la Chus para el viernes? Y es una pregunta que tiene varias versiones. Una, la de los que tiramos de confianza, es la de saber si va a ser de nuevo ella quien haga la comida, primero porque la hace muy bien, y después porque así nosotros no nos tenemos que ocupar de nada. No es egoísmo, es pura vagancia e inoperancia. Y luego está la ... (ver texto completo)
Acabo de ver el tiempo para Semana Santa y me he llevado un disgusto de tomo y lomo. Dado que este año caía a finales de abril, llevaba tiempo regodeándome con él solito de Blacos acariciando mi piel y algún pinchito pecador de “Ca Ricardo” dando vueltas en mi estómago. Ni una cosa ni la otra. Ni el solito de Blacos, auguran unos días invernales que se caga la perra, la temperatura más alta va a ser como la mínima en Baraka y la más baja me da escalofríos. Y en cuanto al tema de los pinchitos ya ... (ver texto completo)
A mi este año no me asusta el frío de Semana Santa, porque estoy preparado. Después de un amplio debate, mi familia y yo hemos decidido por mayoría recuperar las antiguas fuentes de calor. En este hogar, dulce hogar, tenemos previsto pasar las horas hasta que nos salgan cabras en las piernas, que para los que no lo sepan son unas manchas rojas que nacen cuando la piel está a punto de cocer por el calor de la lumbre. Y no creais que ha sido una decisión fácil. Como todos somos muy listos, unos decían ... (ver texto completo)
bien contado y bien explicado queda con las palabras de Alejandro la importancia que el palo tuvo en nuestras vidas, el palo de la Luisa nunca nego asiento, lo compartimos mayores, niños y jovenes. Fue en las mañanas y tardes soleadas, para el barrio de las eras, lo que los poyos de piedra eran para la calle de las petras. se diferenciaban porque el palo de la Luisa, se transformaba por las noches. Tenia una doble vida. También era muy discreto, se mimetizaba con la oscuridad y había que acercarse ... (ver texto completo)
EL PALO DE LA LUISA

Hay lugares que parece que han nacido para vivir eternamente en el recuerdo. Y algunos como este tienen la valentía de mantenerse intactos para mezclar la historia con la memoria. No necesitan hacer alardes, ni vestirse de lujos, ni rodearse de nostalgias. Es algo tan simple como un palo apoyado sobre unos troncos, una piedra o una pila de ladrillos con el respaldo de la pared. No hace falta más... ni menos. Luego la leyenda que lo mantiene en el recuerdo la escriben los que ... (ver texto completo)
A FLOR DE PIEL

Hay veces que las añoro mucho, con ansiedad incluso. Esas miradas limpias, tan limpias que permiten ver siempre lo que hay detrás de los ojos. Miradas a flor de piel que ponen carne de gallina a la amistad. Pero esa amistad que, para empezar, dispara a quemarropa al corazón. Esa amistad que entiende todos los términos del contrato. Esa amistad que sabe leer hasta la letra pequeña, incluso por saber sabe leer siempre entre líneas, y hasta los reglones torcidos de la historia de Blacos. ... (ver texto completo)
El irundarra que estaba encargado de reservar la sidrería me acaba de llamar para decirme que me han borrado de la lista, que no me moleste ni en aparecer por allí. No sabía que leyera esta página. Rencorosos, que sois unos rencorosos.