SERRADILLA DEL LLANO: Hace ya muchos años, llegué a vuestro pueblo, sin conocer...

Hace ya muchos años, llegué a vuestro pueblo, sin conocer a nadie. Pasaría unos días con unos familiares. Sin quererlo, descubrí el amor. Un amor tan dulce, tan joven, tan secreto.
Eran meses de verano, y yo todo un joven, creo que apuesto, de ciudad, y creía que la gente de pueblo, era eso, de pueblo, de lo que en la ciudad teníamos entendido. ¡Qué equivocación más grande, Dios Mío!. Muchos en la Universidad, o estudiando temas complicados... Yo recién salía del instituto de la época.
Recordaba a una muchacha, de cuando éramos pequeños, y venía con su madre emigrante.
Por aquel entonces, ya éramos dos adolescentes, bueno creo que yo mayor que ella. Sentíamos algo tan especial el uno del otro. Paseos de secreto por las afueras del pueblo, besos inocentes, la família entonces, se escandalizaba si se enteraban de estas cosas...
Pero era nuestro secreto a voces. Mucha gente lo sabía. Y se contentaban por ello. Pero que dura fue después la despedida. Volvíamos a nuestros destinos, y juramos llorando, volver a encontrarnos allí en fiestas. Y no pudo ser.
Tiempo después, volví al pueblo con una pareja, y que mal lo pasé. La encontré tomando un refrigerio, con las amigas del pueblo.
Volví a mi ciudad de nuevo roto de dolor...
En aquel transcurso, nos escribíamos, en las letras de nuestras cartas, se notaba la pasión. Pero no quisimos tirarlo adelante.
Luego viniero también malos entendidos, que jamás pudimos hablar...
Nos encontramos otra vez, que visité Serradilla, estalló nuestro amor. Pero volvimos a separarnos...
Hace tiempo supe de ella.
Se había casado el día que yo pedí en matrimonio a mi pareja.
Quería recordar esa fecha.
Después supe, que iba a ser padre y todavía lo pasé peor, pensando que ella podría haber sido la madre de mis hijos.
Y ahora que el que me casé y tuve hijos soy yo, sé que se divorció. Que se hallaba inmersa en la pena.
Yo jamás la hubiese dejado por nadie, pero cuando eres joven... Las cosas suceden, las ideas te vienen y te van, y acabas lamentándote de tantas cosas...
Pensar bien las cosas. Hablar todo lo que tengais en duda, con todo el mundo, y vivir felices sin remordimientos...yo estaría en Serradilla viviendo, casado y con hijos y con el amor de mi vida, y ya veis.
Abrazos a todos los que se sientan igual. Escribidlo, ya vereis que os sentís mejor...