En la
Catedral Vieja. La
capilla de
Santa Catalina.
Manuel José Doyagüe Jiménez (1755-1842) fue un compositor salmantino, dedicado exclusivamente a la
música religiosa en la catedral de su
ciudad natal, donde ingresó como niño de
coro y murió cuando llevaba 53 años como maestro de capilla.
El último maestro de capilla del Antiguo Régimen que alcanzó fama en la zona hispanoparlante, llegando sus obras a Hispanoamérica y Filipinas.
El sepulcro tiene un gallo
veleta que lleva su nombre.
Dirigió la obra el renombrado arquitecto Sr. Repullés, y fue ejecutada por D. Fernando Tarragó.