El arzobispo D. Diago de Anaya fundó en 1422 la
Capilla de
San Bartolomé en el
claustro de la
Catedral Vieja de
Salamanca para su enterramiento y el de su linaje. Hacia mediados del siglo XV se construye un
órgano para esta capilla, que se considera uno de los más antiguos que se conservan. Para colocar el órgano se construyó una llamativa tribuna de estilo mudéjar decorada con lacería de a ocho y piñas mocárabes, que se ha datado a principios del siglo XVI. Esta estructura es una muestra del empleo de carpintería mudéjar no sólo en techumbres, sino que estas técnicas se extedieron a multitud de usos, debido a su belleza y a que permite un buen aprovechamiento del material.